España y Brasil protagonizaron dos amistosos entre el domingo y el lunes con desenlaces similares. En ninguno de los casos llegó la Canarinha con ventaja en el marcador al descanso, lo que prueba la gran igualdad que hubo entre dos selecciones que cuentan con jugadores de primer nivel. Fueron partidos con guiones diferentes que bien podrían haber caído hacia el lado contrario.

Los visitantes remontaron en Zaragoza el 2-1 (goles de Adolfo Fernández y Raúl Gómez), una alegría muy efímera porque, en apenas un minuto, el también culé Dyego Zuffo empató y Marlon Araujo -del Palma Futsal- le dio la vuelta a la situación. Lejos de volver a poner las tablas en el marcador, otros dos jugadores del Barça, Ferrao y Pito, sentenciaron el choque (2-5).

Los de Vidal no terminaron con malas sensaciones, pese a la derrota, tras lo ocurrido en la capital aragonesa, que la cambiaron por Teruel, cuyo pabellón mostró una buena imagen, de cara al segundo duelo. Si en algo se pareció este último fue en el hecho de que tanto Raúl como Adolfo mojaron de nuevo, pero esta vez sus dianas sirvieron para poner un favorable 2-0 al descanso.

Jesús Herrero tuvo un papel fundamental de cara a mantener su portería a cero en los 20 minutos iniciales, aunque no evitó que Marlon recortara distancias unos segundos antes de que Antonio firmara el 3-1. Sin embargo, el combinado sudamericano ya había remontado en el 26' (otra vez con protagonismo para Ferrao y Pito, y también para Arthur, que se encargó de anotar el 3-3).

Por debajo en el electrónico por primera vez en el encuentro, los anfitriones buscaron la igualada con insistencia, pero encajaron un duro golpe cuando Marcenio, con Chino bajo palos como portero jugador, convirtió el 3-5, que parecía ser definitivo porque quedaban menos de 120 segundos. El propio futbolista de Jaén Paraíso Interior dio esperanzas en la siguiente acción, aunque el quinto no llegó (4-5).