El Barcelona se ha clasificado para la final de la Copa de España de fútbol sala gracias a la tanda de penaltis, en la que se ha impuesto por 4-3 al Mallorca Palma Futsal.
Al final del tiempo reglamentario, el marcador reflejaba la igualdad que se había vivido en el Palacio de los Deportes de Cartagena, con un 1-1.
Un marcador bajo en el que los dos porteros, Dídac y Luan Muller, tuvieron mucho que decir. De ahí que no se moviera, tras varias intervenciones de mérito, el marcador al descanso.
En la segunda parte, fueron los catalanes quienes, por medio de Dyego de libre directo, rompieron por fin la sequía. Apenas duró seis minutos la alegría azulgrana cuando Neguinho puso de nuevo las tablas al aprovechar un rechace de la defensa.
El pase a la final, que se jugará este domingo a las 18:30 horas, se tenía que decidir en la tanda de penaltis y ahí el Barça tuvo más acierto que los baleares, imponiéndose 4-3.