Fueron arrestados "84 aficionados ultras, miembros de los grupos radicales seguidores de los clubes de fútbol Real Betis Balompié y C.A. Osasuna", informó la policía española.
Las detenciones se han producido en Sevilla (23), Pamplona (60) y Madrid (1), precisa la nota policial este viernes.
Todos ellos fueron arrestados por presuntos "delitos de desórdenes públicos, riña tumultuaria, grupo criminal y lesiones, todo ello con el agravante de actuar con una motivación de odio", añadió la policía.
El pasado 29 de octubre, antes del partido de la 11ª jornada liguera entre el Betis y el Osasuna en Sevilla, grupos de hinchas radicales se enfrentaron a golpes antes del encuentro.
Miembros del grupo Indar Gorrib de Osasuna, de orientación ultraizquierdista, se enfrentaron con otros de Suporters Gol Sur y United Family, dos grupos radicales béticos de corte ultraderechista.
La policía precisa que se pelearon con "palos de madera, barras de metal y arrojándose mobiliario urbano", movidos por su "enemistad manifiesta debido a su antagónica ideología".
Durante aquella riña corrió por las redes sociales un vídeo en la que se veía a varias personas golpeando a otra inconsciente en el suelo o cómo un grupo de personas increpaba a otro antes de lanzarse diversos objetos.
Se trata de una de la mayores redadas contra grupos ultras del fútbol tras las detenciones relacionadas con el denominado caso Jimmy hace una década.
Entonces, un centenar de personas acabaron siendo detenidas tras una riña entre hinchas radicales del Atlético de Madrid y del Deportivo de La Coruña en Madrid.
Aquella pelea multitudinaria se saldó con la muerte de Francisco Javier Romero 'Jimmy', un seguidor del Depor que fue apaleado y arrojado al río Manzanares por hinchas radicales rojiblancos.
La investigación por la muerte de 'Jimmy' sigue abierta, mientras que 75 personas fueron condenadas a multas por su participación en la pelea.
"Tolerancia cero" ante la violencia en el deporte
Esta operación se considera por la Policía como "la mayor desarrollada contra los grupos radicales en el contexto ultradeportivo de los últimos años en España".
"La Policía Nacional lleva varios años alertando del aumento de los incidentes violentos relacionados con estos grupos ultras y trata de contrarrestarlos con una política de 'tolerancia cero' ante las manifestaciones extremistas, radicales y violentos en el deporte".
La operación, dirigida por el Juzgado de Instrucción número 7 de Sevilla, se encuentra todavía abierta por lo que no se descartan más detenidos.