Si bien el tropiezo de España no es definitivo, el bofetón que se ha pegado el equipo de Luis Enrique es grande por cuanto llega a menos de dos meses del Mundial de Catar.

Cierto que si el martes España gana en Braga a Portugal obtendrá el billete a la 'Final 4', pero la imagen ofrecida este sábado en La Romareda de Zaragoza por los españoles, sobre todo en defensa, no hace presagiar demasiadas cosas buenas de cara a la cita mundialista.

"El martes tenemos una final importante", aseguró el delantero Borja Iglesias a RTVE tras el encuentro. "Hay que ir a ganar, a demostrar que estamos capacitados para jugar partidos de este nivel", añadió el jugador del Betis, que debutó con La Roja.

La victoria permite a los suizos llegar a la última jornada con ventaja de dos puntos ante República Checa y le bastará el empate el martes en St. Gallen para mantenerse en la primera categoría del torneo continental.

- CR7, sin olfato de gol -

Los checos llegarán además a ese duelo con el varapalo sufrido en casa este sábado, cuando Portugal les pasó por encima y se llevó la victoria con una goleada por 4-0.

El defensa del Manchester United Diogo Dalot fue uno de los protagonistas del partido con dos goles (33 y 52), mientras que los autores de los otros fueron su compañero en el United Bruno Fernandes (45+2) y el delantero del Liverpool Diogo Jota (82).

Cristiano Ronaldo se quedó en esta ocasión sin marcar, pero protagonizó una de las imágenes del partido, ya que en un fuerte encontronazo con el portero checo Tomas Vaclik al comienzo del encuentro (minuto 13) se le abrió una herida en la nariz, por la que sangró mucho y que llevó a los servicios médicos de la selección portuguesa a coserle la brecha en el mismo terreno de juego.

También tuvo un papel clave en una jugada que pudo haber cambiado el signo del encuentro: en la última acción antes del descanso, el balón le pegó en un brazo y el árbitro señaló un penal... que Patrik Schick envió a las nubes, desperdiciando la ocasión de haberse ido a los vestuarios con el marcador 2-1.

A Portugal le vale con empatar ante España para clasificarse para la Final Four.