Carlos Suárez (36) completará la temporada 2022/23 en el Hereda San Pablo Burgos, que compite en LEB Oro. El jugador de 2,03 metros ha participado durante las últimas dos semanas en las sesiones de entrenamiento de los castellanos, a las órdenes de Curro Segura, y ha convencido para firmar hasta el final de la presente campaña.
El madrileño, que se formó en las categorías inferiores de Estudiantes, donde estuvo más de un lustro, ha hecho carrera en la máxima categoría de la ACB. Tanto es así que jugó durante tres temporadas en el Real Madrid, uno de los dos gigantes, aunque la mayor parte de su carrera la desarrolló en el Unicaja de Málaga. Casi una década disfrutó del ambiente del Martín Carpena, una plaza que vibrará este sábado 4 de marzo cuando reciba por primera vez a su equipo después de coronarse campeón de la Copa del Rey.
San Pablo estuvo durante la pasada campaña en Liga Endesa, pero no logró la permanencia. Es uno de los que está peleando ahora por ascender, aunque ni mucho menos lo va a tener sencillo: se ubica en la octava posición, con muchas opciones de disputar la promoción de ascenso. Palencia y MoraBanc Andorra pugnan por el primer puesto para subir de manera directa; ocho equipos más, entre ellos el conjunto burgalés, aspiran a pelear eliminatorias mediante para competir contra los mejores.
El futuro de Suárez, que ganó una Eurocup con la entidad de la Costa del Sol allá por 2017, una vez termine la presente temporada, esté donde esté su actual club, se presenta como una incógnita. Mucho tendrá que ver el apartado físico, ya que sufrió numerosas lesiones en el Unicaja, especialmente durante los últimos meses. Sus problemas musculares lo condenaron al ostracismo. No juega desde el 14 de abril de 2022, cuando los malacitanos vencieron por 63-73 al Barcelona en el Palau.