De regreso a la competición, tres meses después de su eliminación en cuartos del Mundial como anfitrión, Francia encajó cinco tries en un partido en el que sufrió de lo lindo ante el vigente campeón.
El maldito duelo de cuartos del Mundial ante el a la postre ganador Sudáfrica (29-28) de octubre no parece haber abandonado a Francia, que concedió su derrota más dura con el seleccionador Fabien Galthié.
Un varapalo que lo aleja en su intención de levantar la moral con el Seis Naciones ante un equipo irlandés, vencedor con el bonus ofensivo (cinco tries), que no parece tener rival en el hemisferio norte.
El estadio Velodrome de Marsella, un decorado inhabitual para el Seis Naciones -el Estadio de Francia está en obras para los Juegos de París, en menos de seis meses-, Francia, sin su líder Antoine Dupont -que disputará el rugby VII en la cita olímpica-, no dio señales de vida en el primer tiempo.
Dominio irlandés total
Sin imaginación, concedieron dos tries, firmados por Jamison Gibson-Park (16) y Tadhg Beirne (30).
Irlanda, sin su metrónomo Johnny Sexton, retirado, dominó en todos los sectores del juego. No hubiera necesitado la superioridad numérica de la que dispuso desde la media hora de juego después de la expulsión de Willemse tras un placaje incorrecto a Caelan Doris.
La expulsión despertó a Francia y al Velodrome, con Damian Penaud inscribiendo su 36º try para los Blues, dejando algo de esperanza al descanso (10-17).
El segundo línea Paul Gabrillagues regresó al equipo francés cuatro años después con un try (53), pero Irlanda era mucho más fuerte; con Calvin Nash (46), Dan Sheehan (62) y Ronan Kelleher (78) sellando su primera victoria en Francia en el Seis Naciones desde 2018.