Mickelson fue uno de los primeros jugadores en pasarse del PGA Tour al LIV, respaldado por Arabia Saudí en 2022, y ha sido uno de los defensores más destacados de la nueva organización.
El norirlandés McIlroy era, en muchos sentidos, su homólogo como firme defensor del PGA Tour, con sede en Estados Unidos, y un crítico declarado del LIV.
Pero ahora que los circuitos de golf están negociando un acuerdo marco para fusionar el PGA Tour y el Fondo de Inversión Pública Saudí (PIF), patrocinador de LIV, McIlroy ha cambiado de tono.
En una entrevista con el podcast Stick to Football, McIlroy, que en julio dijo que prefería retirarse antes que jugar en eventos de la LIV, sugirió que si la liga se creaba con su propia ventana en la temporada, como la Indian Premier League de cricket, consideraría jugar en ella.
McIlroy también dijo que la LIV había "expuesto algunos de los defectos de las estructuras del golf profesional" y fueron esas palabras las que Mickelson destacó en las redes sociales.
"Esta cita y las muchas otras hechas... por Rory probablemente no fueron fáciles de decir", dijo Mickelson en un post en Twitter.
"No usemos esto como una oportunidad para amontonarnos. Más bien, es hora de que yo y otros dejemos de lado nuestras hostilidades y trabajemos por un futuro positivo".
La postura de línea dura de McIlroy sobre la LIV comenzó a descongelarse después de que abandonara la Junta de Política del PGA Tour en noviembre y, en particular, tras la decisión del campeón del Masters Jon Rahm de unirse a la LIV el mes pasado.
McIlroy pidió que se modificaran las normas europeas de clasificación para la Ryder Cup con el fin de garantizar que el español pudiera seguir participando en la competición y, en particular, no criticó la decisión de Rahm de aceptar un acuerdo que, según se dice, está valorado entre 300 y 600 millones de dólares.
Mickelson dijo que creía que el cambio de Rahm había provocado un cambio en el ambiente general.
"El fichaje de Rahm se está convirtiendo en un puente para acercar a ambas partes, como demuestran los numerosos comentarios de hoy y de hace un mes sobre cambiar las reglas de la Ryder Cup para que Jon y otros puedan jugar, así que utilicémoslo como tal", dijo el estadounidense, ganador de seis majors.
"Hasta que se llegue a un acuerdo, todo seguirá igual para ambas partes, pero esperemos que sin el desdén innecesario".
Las negociaciones entre los responsables de la PGA y la FIP han ido más allá de una fecha límite original de diciembre de 2023 y aún no han surgido detalles sobre los planes de lo que presentaría una estructura unificada de la PGA-LIV, incluso cuando los rivales planean temporadas separadas para 2024.
Un poco crítico
McIlroy había hablado en el pasado de una sensación de "traición" al ver a sus compañeros europeos de la Ryder Cup pasarse a la LIV y dijo que algunos habían sido "tramposos" en la forma en que manejaron el cambio.
Pero en la entrevista del podcast, dijo que ese enfoque había sido un error. "Creo que al principio juzgué un poco a los que se pasaron al golf LIV, y creo que fue un error por mi parte, porque ahora me doy cuenta de que no todo el mundo está en mi situación o en la de Tiger Woods", dijo.
"Todos nos convertimos en profesionales para ganarnos la vida practicando los deportes que practicamos, y creo que de eso me he dado cuenta en los dos últimos años. No diría que he perdido la lucha contra la LIV, sino que simplemente he aceptado el hecho de que ahora esto forma parte de nuestro deporte".