Xavi, que siempre ha defendido a su plantilla, ya está harto. Después de ganar con mucho sufrimiento al colista de LaLiga, ha roto la protección de su vestuario para señalar directamente a sus futbolistas. 

"El equipo no tiene ese alma que teníamos el año pasado, ni agresividad ni concentración", ha recalcado en los micrófonos de Movistar +. 

También culpaba en rueda de prensa a esa dificultad para ganar a la falta de acierto de cara a portería contraria y a la nula actitud de sus hombres. "Hemos vuelto a tirar 30 veces, pero la primera parte es inaceptable, nada buena. Se lo he dicho a los jugadores en el descanso. Es la charla más dura como entrenador que he tenido. En la segunda hemos cambiado la cara. Aun así, hemos regalado los dos goles, hemos perdonado mucho. O nos dejamos la piel o no ganaremos nada". 

De ahí los dos cambios en el descanso, quitando a Joao Félix y a Christensen. "Necesitábamos más ritmo, más intensidad. La segunda parte es la que le pedimos al Barça. La primera ha sido inaceptable". 

Después, en rueda de prensa, insistía en que "si nos falta efectividad, como mínimo hay que tener agresividad. O corremos como animales o no nos llega. No tenemos la calidad del Barça de 2010".

Al menos, el de Terrassa salva a su capitán, clave con su doblete. "Es un ejemplo, es el capitán y tira del carro, juegue o no, casi marca un hat-trick. Más allá de ésto, el trabajo, el cómo anima a la gente en el vestuario... es un capitán en mayúsculas y me alegro por él".