West Ham - Luton, sábado 16:00

Los Hammers pueden formar parte de algunas historias interesantes al final de la presente temporada, aunque ellos mismos ya no tengan mucho que jugarse. Como resultado de la debacle de hace una semana en Stamford Bridge (0-5), perdieron incluso una esperanza matemática de acabar entre los seis primeros, lo que asegura la participación en las Copas de Europa, y ya está claro que el equipo dejará al entrenador David Moyes después de la temporada, cuyo sucesor debería ser el español Julen Lopetegui.

Sin embargo, las próximas semanas serán cuestión de vida o muerte para los dos rivales que les quedan. En la última jornada, el West Ham se enfrentará al Manchester City y antes recibirá al Luton ante su afición. Una justa que podría decidir no sólo el título, sino también quién pierde su puesto en la Premier League. Dicho esto, no hay muchos rivales mejores que el West Ham en estos momentos...

De hecho, los números de la muestra de este año natural lo dicen todo. En los últimos 16 partidos, el West Ham, junto con el Luton, tiene la peor defensa de la liga. Permiten a sus rivales una media de 2,06 goles esperados por partido (sin contar los penaltis), 2,00 reales y 17 tiros a puerta, los mismos que el ya descendido Sheffield United y el Burnley, que no está lejos de caer un escalón por debajo. Sólo la portería del Manchester United, defendida por André Onana, ha visto un mayor volumen de disparos esta temporada.

Aunque el reciente regreso del magnífico receptor Alphonse Areola, que se perdió seis partidos en abril por lesión, es un gran impulso para el West Ham, ni siquiera él es omnipotente y un Luton motivado tendrá muchas oportunidades de marcar. Además, la miseria de los londinenses también se ha reflejado en su ataque.

Están promediando 1,17 xG por partido este año natural, y sólo el Wolves crea menos oportunidades de gol de calidad. Todo ello a pesar de que Moyes ha podido utilizar los servicios de jugadores como Luqas Paqueta, Jarrod Bowen y Mohammed Kudus en los últimos tiempos . En este contexto, su planeada marcha parece un paso lógico.

El Luton está inmerso en un tira y afloja por la permanencia en la liga, especialmente con el Nottingham, del que le separan tres puntos a falta de dos jornadas. Junto con el West Ham, el Fulham se interpone en su camino, por lo que dos victorias deben ser el objetivo. El inconveniente para el Nottingham es un sorteo algo más complicado: se enfrenta al Chelsea en casa antes de viajar a Burnley en la última jornada.

Nottingham - Chelsea, sábado 18:30

Sin embargo, no carece en absoluto de posibilidades en su contra. El Nottingham no recurrió esta semana la deducción de cuatro puntos por incumplir las normas financieras y tendrá que luchar duro para mantenerse en la Premier League. Pero quizás sería una lástima que el Black Peter saliera sólo del lado simpático que le dio una buena paliza al Manchester City en casa hace dos semanas, y podría hacer lo mismo contra el Chelsea este fin de semana.

El equipo local está especialmente adornado con una sólida defensa. En términos de calidad y volumen de ocasiones permitidas, sólo dos equipos son mejores actualmente: el mencionado City y su rival por el título, el Arsenal. Las actuaciones defensivas de jugadores como Nicolás Domínguez, Danilo y Murillo han cosechado elogios con regularidad, y todos los puntales también deberían dar la talla en el importantísimo duelo del sábado.

La plantilla del Chelsea es mucho más amplia y cuenta actualmente con ocho nombres, entre ellos Enzo Fernández, Reece James y Ben Chilwell. Aunque el conjunto londinense aún está disputando la Copa de Europa y cuenta con un ataque que funciona bien, la defensa del Nottingham debería ser un hueso duro de roer, no sólo por su calidad general, sino también por su rendimiento ante equipos que confían en la transición rápida al ataque.

El Chelsea es uno de ellos. Desde enero, es el quinto equipo que más ocasiones de peligro crea a partir de rápidas contras, mientras que el Nottingham sólo es superado por el Arsenal a la hora de defenderlas. Por lo tanto, Mauricio Pochettino deberá idear un buen plan para enfrentarse a un rival problemático.

Villarreal - FC Sevilla, sábado 16:15

A falta de cuatro jornadas para el final, el Villarreal, noveno clasificado, está a siete puntos de los puestos de Copa y, aunque tiene alguna posibilidad de alcanzarlos, aún le quedan partidos contra el Real Madrid y el Girona. La probabilidad de éxito es, por tanto, mínima. Además, aunque las casas de apuestas dan como favorito al equipo en el próximo duelo contra el Sevilla, como mínimo debería ser equilibrado.

A pesar de un comienzo de temporada desastroso, el Sevilla ha remontado sus resultados y ha empezado a rendir especialmente bien en ataque tras la llegada del nuevo entrenador, Quique Flores, en diciembre. Bajo su dirección, tiene la sexta mejor línea ofensiva desde Navidad, y en métricas importantes se parece mucho al Villarreal. Según los modelos analíticos, ambos equipos deberían haber anotado exactamente el mismo número de puntos al mismo tiempo.

La defensa del Villarreal definitivamente no es una de las más sólidas y el Sevilla de Flores puede encontrar muchas maneras de abrirse camino hacia una posición de tiro de calidad. No sólo lo consigue con un ataque progresivo, sino que también cuenta con contragolpes bien gestionados y normas ofensivas. En estas dos últimas disciplinas, el Submarino Amarillo es uno de los equipos más vulnerables de LaLiga. Por ejemplo, ya ha encajado 10 goles en contraataques este año natural, la mayor cantidad de la competición.