El Barça estimaba que, en la acción que supuso la expulsión de Xavi, éste, simplemente, "se dirige al cuarto arbitro para manifestarle su incredulidad sobre una determinada decision arbitral y que, en ningun caso, el Sr. Hernandez realizó gesto de desconsideracion alguno, ni tampoco gritó al cuarto arbitro, como se indica en el relato del acta, entendiendo que en estos hechos radica el error material manifiesto en la redaccion del acta arbitral".
Sin embargo, después de valorar la prueba videográfica aportada por los servicios jurídicos de la entidad catalana, el Comite de Apelacion entiende "que no es posible apreciar un error material manifiesto capaz de desvirtuar la presuncion de veracidad del acta arbitral".
En concreto, especifica que "la prueba videográfica aportada reproduce una acción en la que no se aprecia el desarrollo integral de la jugada. Asi, al centrarse el vídeo en el entrenador, no se puede apreciar cuándo el colegiado es advertido, previamente, por el 4o árbitro, advertencia que se produce, según el relato del acta, al realizar dicho entrenador observaciones de carácter técnico a una de las decisiones del árbitro, voz en grito y realizando gestos de desconsideración. Al no recoger el vídeo toda la acción completa con la visión de la actuación del 4o árbitro y del propio colegiado, no cumple con los requisitos de demostrar la existencia de dicho error material manifiesto, en los términos necesarios a tal efecto".
Así que la sanción, salvo último recurso del Barcelona, de dos partidos sin poder sentarse en el banquillo permanece y Xavi volvería a dirigir al equipo en LaLiga desde el terreno de juego en el Santiago Bernabéu el 21 de abril a las 21 horas.