El cuento de hadas que vivía el Bayer Leverkusen en esta inolvidable temporada no acabó con aquello de "y todos comieron perdices". No fue un final feliz el protagonizado por los de Xabi Alonso, que vieron cómo la Atalanta era la que levantaba el trofeo de campeón de la Europa Liga. Y con todo merecimiento, sí señor.
Primero, porque su plan, el de Gasperini, salió mejor. Su presión alta provocó un insoportable dolor de cabeza al Bayer, desconocido en su habitual pulcra salida desde atrás. Cuando los germanos lograban escapar de ella, todos cerraban los espacios que conducían a Wirtz para provocar un cortocircuito de considerables dimensiones.
Eso sin balón. Pero es que con balón también demostraron su enorme capacidad para crear peligro. El primer tanto llegó antes del cuarto de hora en una incursión de Zappacosta por la derecha y un centro al corazón del área donde apareció un hambriento Lookman para retratar a un indolente Palacios y marcar a placer el 1-0. La titularidad del argentino en lugar de Andrich no se entendió nada bien.
No reaccionó nada bien el Leverkusen. Xhaka era el único que intentaba darle algo de cordura a su ataque, pero las pérdidas se sucedían en posiciones peligrosas. Por ahí llegó el 2-0, obra también de Lookman. Un saque al medio campo del portero lo cedió hacia atrás con la testa Adli, regalando la bola al extremo de la Atalanta, que se sacó un regate maravilloso ante Xhaka y un remate aún mejor desde la frontal para marcar el segundo.
El campeón de la Bundesliga apenas pudo saborear una ocasión de gol, una llegada de Grimaldo que el español resolvió mal en el mano a mano con una vaselina que se quedó muy corta, fácil de atajar para Musso.
Un Leverkusen desconocido
Entró en la segunda mitad el campeón de la Bundesliga con mejor actitud ofensiva, encerrando al rival en su propia área, algo que dejaba más espacios para los contragolpes, pero que no encajaba demasiado en lo que Gasperini quería. Estar tan cerca de Musso era una invitación para que los Boniface, que había entrado tras el descanso, Wirtz y compañía pudieran encontrar el remate que les metiera en el encuentro.
Pero pronto quedó claro que no era el día de los germanos, que los de mayor calidad no tenían su día, o habían hecho los de Bérgamo que no lo tuvieran. Todo lo contrario que Lookman. Porque el nigeriano, tocado por la varita de los dioses del fútbol, en una contra conducida por Scamacca, le ganó la partida a un pasota Tapsoba para armar un zurdazo que se convirtió en el 3-0.
Ahí se acabó la final. Ya no hubo reacción en los de Xabi Alonso, que vieron cómo se acababa su condición de invicto en el peor momento posible. La Atalanta es la escuadra campeona de la Europa Liga, el primer título continental en la historia de la entidad italiana.
Jugador Flashscore del partido: Lookman (Atalanta).