Carlos Alcaraz dijo que el récord de Novak Djokovic de diez victorias en diez finales en Melbourne Park hace que la perspectiva de ganar por primera vez, derrotando al tenista de 36 años en la Rod Laver Arena, sea aún más atractiva.
"Es una motivación extra para mí. Soy un tipo ambicioso. Siempre quiero jugar contra los mejores jugadores del mundo para ver cuál es mi nivel", dijo el murciano ante los medios de comunicación.
"Obviamente es una buena prueba, jugar contra él en el torneo donde está casi invicto. Quiero llegar a la final y espero jugar una final contra él. Sería estupendo"; continuó.
"Pero, sí, conociendo esas estadísticas, es una motivación extra, seguro", agregó.
Como primer y segundo cabeza de serie, Djokovic y Alcaraz se enfrentarían el 28 de enero si ninguno de los dos cae antes.
Por muy tentadora que sea esa perspectiva para los aficionados al tenis, exigiría una notable mejora para Alcaraz, que nunca ha pasado de la tercera ronda en sus dos visitas a Melbourne.
El año pasado se perdió el torneo por una lesión en los isquiotibiales, mientras que el de Belgrado ganaba su décimo título y arrebataba el número uno a su joven rival.
"Este año va a ser bueno"
Alcaraz ha viajado a Australia sin su entrenador, Juan Carlos Ferrero, y ha decidido no competir antes.
"Creo que soy un tipo que no necesita tanta competición antes de un gran torneo", expresó.
"Obviamente ayuda, pero creo que estoy preparado para hacer un buen papel aquí en el Grand Slam", dijo.
La confianza rezumaba en el número dos del mundo durante su comparecencia, en la que habló sobre cómo él y jugadores de la talla de Holger Rune y Jannik Sinner formaban la base de una "nueva generación".
Y lo que es más importante, el de El Palmar es el único del trío que ha ganado un Grand Slam tras su triunfo en el Abierto de Estados Unidos de 2022 y su victoria sobre Nole en la final de Wimbledon del año pasado.
Aunque acepta que todavía hay mucho que trabajar, dijo tener buenas sensaciones sobre lo que le deparará el nuevo curso.
"Dentro y fuera de la pista. Creo que todo el mundo puede mejorar. Yo no soy perfecto, así que tengo que mejorar muchas cosas en la cancha y también fuera de ella", dijo.
"Creo que este año va a ser bueno", concluyó con una sonrisa.