Santi Aldama fue uno de los integrantes del quinteto inicial de los Memphis Grizzlies para el partido contra Charlotte Hornets, aunque más allá de eso, lo más importante es que volvió a superar los 20 minutos (21:01) en una nueva demostración del rol principal que tiene en su equipo. Además, fue el séptimo máximo anotador del encuentro (12 puntos).
Su gran estado de forma coincide con un momento álgido de confianza -van unidos en muchas ocasiones-, lo que esta noche lo llevó a intentar, por ejemplo, cinco triples (acertó en dos). No tuvo ninguna oportunidad desde el tiro libre y encestó tres lanzamientos de dos puntos de cuatro posibles. Unos buenos números que se suman a los cinco rebotes que capturó -muy lejos, claro, de los 19 que cogió su compañero Steven Adams en lo que fue una auténtica exhibición de cómo jugar en la pintura- y la asistencia que dio.
El primer cuarto ya sirvió como pista para saber lo que podía esperarse del duelo. Ni siquiera pudieron ponerse por delante los visitantes en la primera jugada, todavía con igualdad en el electrónico, y más adelante, sobre todo varios minutos después, comenzó a ser casi una cuestión de fe. La ventaja llegó a ser de 20 puntos, aunque se cerró con un igualmente amplio 41-24.
Al inicio del segundo se vio una mínima reacción de los Hornets, liderados por Kelly Oubre y James Bouknight (17 y 14 puntos respectivamente), pero sirvió de poco porque la diferencia terminó siendo todavía más elevada al final (71-47). El descanso y la charla de Steve Clifford, lejos de servir para provocar un giro de guion, fueron una mera transición para que los Grizzlies dieran el golpe definitivo en el tercer cuarto (104-69) y, pese a gozar de una ventaja de +44, poner el broche final a una dura paliza (130-99).
Puedes consultar las estadísticas del contundente triunfo de los Grizzlies frente a los Hornets.