Cuando un equipo acumula 15 jornadas consecutivas sin ganar, lo que vienen a ser cuatro meses y medio, el nivel de desesperación alcanza límites insospechados. Y esa frustración puede ser el peor enemigo para un equipo como el Cádiz, que regresó a puestos de descenso tras perder contra el Granada en el Nuevo Los Cármenes. Una vez confirmada la derrota, Sergio González reclamó clemencia, una oportunidad más, para recuperar la confianza.
Y esa especie de ultimátum autoimpuesto llegó este 14 de enero, contra el rejuvenecido Valencia, en la Tacita de Plata. Hasta el más ambicioso perdió algo de ilusión cuando Hugo Duro culminó una fantástica jugada de Diego López por la banda derecha, un autopase ante Rafael Giménez Fali que le permitió llegar hasta línea de fondo y ofrecer un buen centro que hizo todavía mejor Hugo Duro, que ya suma ocho goles en esta edición de LaLiga EA Sports (récord personal).
Un halo de luz
La tarde había empezado mal y empeoró con la lesión de Fede San Emeterio, sin participación en el torneo doméstico desde la tercera jornada, antes de alcanzarse el cuarto de hora. El estado de ánimo cambió por completo con la visita de Isidro Díaz de Mera al monitor debido a una supuesta mano en el área tras el intento de Rubén Alcaraz vía libre directo. El colegiado ratificó la controvertida pena máxima, cosas del fútbol moderno, y el propio jugador catalán se encargó ejecutarla con éxito.
Luis Hernández, ese hombre que tiene una catapulta en sus brazos para los saques de banda, coqueteó con la expulsión por un inexplicable golpe en el rostro del autor del primer tanto, aunque el colegiado optó por el menor de los castigos. Lo cierto es que sólo faltó la roja antes de que llegara el descanso, ya que hubo una amonestación, dos goles, un penalti, un cambio obligado y hasta siete minutos de descuento.
Una traca de goles
Se las prometían felices los locales, que soñaban con la remontada a lo largo de una segunda mitad que volvió a torcerse muy pronto. Sergi Canós, que había amenazado en otra ocasión con un disparo rechazado por la defensa, la puso con maestría al espacio y encontró sin marca al joven Diego López. Eran dos atacantes para un solo zaguero y el canterano optó por definir con clase al segundo palo. Vuelta a empezar para los amarillos.
Iván Alejo, que no se libró de la tarjeta (quinta consecutiva y 11 en total esta campaña), pudo marcar de rebote y sin querer ante el exceso de calma de Giorgi Mamardashvili al sacar el cuero desde atrás. También lo intentó Alcaraz desde lejos, pero al ex del Real Valladolid le faltó algo de puntería. En líneas generales, sin embargo, necesitaban ideas y frescura para incomodar a un rival que estuvo muy tranquilo tras adelantarse de nuevo en el marcador.
Los de Sergio, cuyo puesto peligra más que nunca, demostraron por qué son el peor ataque de la categoría (15 dianas, cuatro menos que el Almería y tres por debajo de Mallorca, Alavés y Rayo). Un cabezazo de Chris Ramos animó mínimamente al público, que cada vez siente más desazón por la inoperancia de los suyos. Javi Guerra y Jesús Vázquez, ambos incorporados desde el banquillo, completaron la goleada. "Sergio, vete ya", se escuchó desde la grada.
Jugador Flashscore del partido: Diego López.
Las estadísticas del choque están disponibles en Flashscore.