¿Será la Eurocopa 2024 el punto de inflexión en el mandato de Didier Deschamps?

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¿Será la Eurocopa 2024 el punto de inflexión en el mandato de Didier Deschamps?

¿Será la Eurocopa 2024 el punto de inflexión en el mandato de Didier Deschamps?
¿Será la Eurocopa 2024 el punto de inflexión en el mandato de Didier Deschamps?FRANCK FIFE/AFP
Didier Deschamps, que tiene contrato con la Federación Francesa de Fútbol hasta el 31 de julio de 2026, aún no está preparado para abandonar el cargo de seleccionador. Sin embargo, a pesar de sus continuos éxitos, su futuro no es tan brillante como parece. Esto se debe a que el fútbol se parece cada vez menos al estilo que él predica.

En el cargo desde el 8 de julio de 2012, Deschamps ha escrito la historia de Les Bleus partido tras partido. Nunca antes un seleccionador había permanecido tanto tiempo en el banquillo como él. Un récord que no parece que vaya a batirse pronto, sobre todo teniendo en cuenta que su marcha no está en los planes. " Pueden contar conmigo para mantener a la selección francesa al más alto nivel internacional", declaró tras prolongar su contrato.

Es una coherencia bastante ejemplar si se mira el camino recorrido, porque los muy buenos resultados continúan año tras año, a pesar de algunos tropiezos. Pero, si dentro de ocho meses se produce un fracaso en Alemania, ¿tendrá que aceptar Deschamps que tendrá que hacerse a un lado? Tal vez, dada la forma en que se ha desarrollado la década del fútbol...

¿Un mandato eterno?

En el siglo XXIᵉ, pocos entrenadores pueden presumir de haber permanecido más tiempo en el mismo banquillo que el campeón del mundo de 2018. De hecho, un reinado de 11 años y 3 meses es impresionante y, en el caso de Didier Deschamps, debería durar un poco más. Quizás podría batir el récord de longevidad. Otros nombres lo han hecho mejor en los últimos veinte años.

En la historia reciente, Óscar Tabárez es el campeón. Permaneció al frente deUruguay durante 15 años y 8 meses (2006-2021), lo que le sitúa en el sexto puesto de todos los tiempos. En segundo lugar está Morten Olsen, también en el cargo durante más de 15 años, con Dinamarca (2000-2015). Aparte de los que han durado con naciones menores como San Marino(Giampaolo Mazza), Andorra(Koldo Álvarez, aún en el cargo) y Luxemburgo(Luc Holtz, también actualmente en el cargo), sólo Joachim Löw lo ha hecho mejor recientemente: conAlemania de 2006 a 2021.

Tabárez, Olsen y Löw tienen algo en común: sus aventuras acabaron mal, y sus sucesores no siempre han tenido el éxito esperado. Obviamente, cuando Deschamps se retire, la herencia será pesada. Sin embargo, esperemos que sea lo suficientemente lúcido como para dejar su puesto en el momento adecuado: cuando ya no pueda "mantener a la selección francesa al más alto nivel internacional".

¿Y si ese momento llega antes de lo previsto? Es una posibilidad, sobre todo si se ponen en perspectiva las diversas críticas que ha recibido en los últimos años. Respondió en particular con el éxito de 2018, pero el fútbol se cuestiona constantemente, a diferencia de su discurso, que no parece evolucionar. Conla Eurocopa 2024 a la vuelta de la esquina, Les Bleus no son inmunes a una decepción como la de hace tres años.

Quizás si Les Bleus fracasan, por ejemplo, de nuevo en la final de 1/8ᵉ, Deschamps tendrá que aceptar pasar la antorcha. Sin embargo, en esta fase de clasificación no hay nada de lo que quejarse, su selección se clasificará tranquilamente para su 10ᵉ Eurocopa. Todo un rendimiento si tenemos en cuenta que algunas naciones menores pueden dar más problemas gracias a algunas buenas nuevas generaciones(Noruega, Georgia, Ucrania, Turquía, Armenia, Austria, Hungría, Serbia, Eslovenia, Rumanía).

Pero en un ecosistema futbolístico en constante evolución, Deschamps parece cada vez más anacrónico en su enfoque del juego y de todo lo que conlleva, como la creciente importancia de los datos, incluso en el fútbol de selecciones. Sus métodos y su retórica obstinada están dando la razón a los críticos de los observadores más jóvenes. Hasta ahora, siempre lo ha conseguido, pero no es seguro que el rendimiento de sus jugadores pueda mantenerlo a flote para siempre, a pesar de una magnífica generación.

Desde 2012, puesto que son sus resultados los que han definido su futuro, el juez de paz será el recorrido de Les Bleus en Alemania, pero el fútbol francés haría bien en apoyarse en otros barómetros para mirar al futuro con serenidad.