Un Nadal frío de inicio y un De Miñaur con las ideas claras, con un saque y un fondo efectivos y con la ambición de derrotar a un jugador que, aunque ha dejado de competir en el último año por culpa de las lesiones, no deja de ser un ícono en el tenis Mundial.
Álex De Miñaur ha superado con comodidad a un Rafa Nadal que buscó alguna reacción (en especial en el primer set) pero que no logró esconder la falta de ritmo ni las imprecisiones propias de la misma.
El primer set se le escapó a un Nadal que inició algo frío. De Miñaur tomó distancia en los puntos iniciales. El balear, sin embargo, reaccionó. La respuesta del español fue insuficiente para evitar que el australiano se hiciera con el primer set con un ajustado 7-5.
De Miñaur no dejó espacio para las sorpresas en el segundo set. El australiano, consciente del desgaste físico de Nadal, expuso su fortaleza en el saque y ocasionó una serie de errores no forzados por parte del balear que teminaron ocasionando un punto de ruptura en el 4-1.
Para ese entonces, Nadal ya sentía las consecuencias del cansancio. Sin embargo, se guardó un poco de fuerzas para animar al público y le ha dado la pelea a De Miñaur en los últimos puntos del segundo set. El ánimo del balear, no obstante, no alcanzó para frenar el ímpetu del australiano, quien decidió liquidarle con un certero 6-1 que acabó con su sueño en el que puede ser su último Godó.