Luis Rubiales (46) ha explicado su situación actual, detallando que le han intervenido tanto sus cuentas españolas como las dominicanas y que no tiene nada que ocultar. "Ayer me quitaron a mí aquí todos mis teléfonos. No quería borrar nada y he volcado todo para que se lo lleven. No quería que se perdiese nada. Ha sido una operación conjunta de gente de la OCU con gente de aquí en la que se han llevado los teléfonos que teníamos y ya está. Me han bloqueado las cuentas de aquí hace un día y las de España hace cuatro o cinco días".
Asimismo, negó cualquier tipo de inversión en Cabo Verde."Ni he estado en Cabo Verde ni tengo negocios allí. No he hecho nada allí. Pero tendría todo el derecho del mundo".
El de Motril no cree que peligre el Mundial en absoluto. "No peligra el Mundial. Las investigaciones se tienen que llevar hasta el final. No he hablado con alguien del gobierno. No desde que fui forzado a dimitir".
Con respecto a la Supercopa, asegura que el traslado del torneo a Arabia Saudí ha servido para ayudar al fútbol más humilde. "Elegimos la mejor oferta. La de Catar no era ni una oferta. Era una propuesta que tenían que validar en diez días y no la validaron. España recibía 120.000 euros de la Supercopa y a partir de entonces recibió mucho más. Y fueron a parar al fútbol modesto para salvar muchas cosas durante la pandemia".
Y prosigue: "Yo no hablé con Piqué, me mandó un mensaje durante el Mundial Femenino. No he hablado mucho con él. Un mensaje por el mes de septiembre y ya. Jamás he tenido negocios en Arabia Saudí. Me estoy moviendo con todos los contactos que tengo. Tengo el derecho a ganarme la vida. Porque, entre otras cosas, soy una persona libre. Aunque ahora me lo están poniendo todo muy difícil"
Sin relación con Pedro Rocha
Rubiales aseguró que no tiene contacto alguno con Pedro Rocha en la actualidad. "Creo que hablé una vez por teléfono con Pedro Rocha. Hace tres meses o cinco, no lo sé. No tengo relación con él. Yo me he apartado totalmente. No he llamado a nadie de las territoriales. Si alguno me ha llamado ha sido para darme ánimos. No he querido saber nada de tema de elecciones".
Con respecto a los escándalos de la Federación, negó categóricamente haber estado con prostitutas. "Estoy dispuesto a que me pongan suero de verdad y me pregunten si he estado con alguna prostituta y le diré que no. Nadie va a poder comprobar nunca porque nunca he estado".
Jenni Hermoso
Con respecto al beso de Jenni Hermoso, negó categóricamente que hubiera coacciones. "Solo hablé con Hermoso diez segundos en el avión. Le pedí salir a decir lo mismo que habíamos dicho. Si eso es una coacción, cualquier conversación entre dos personas es coacción".
Además, se reafirma en que Hermoso le da su consentimiento. "Un agresor sexual no pregunta. En el contexto, sexual no había nada. Ella me dice que vale. Incluso en una historia ella lo reconoce. Están los videos anteriores y posteriores. Que cada uno opine. En ningún caso ha habido agresión. No hay más que verlo. Ella misma salió de manera inmediata a desmentir que hubiese nada".
Rubiales, recordó que de entrada Jenni no dio importancia al asunto: "Mis hijas estaban delante cuando Hermoso dijo que era un beso entre amigos. No hay coacciones. Nadie va a poder demostrar que hubo coacciones. En un lugar en el que había cámaras y gente grabando con teléfonos, nadie va a poder demostrar que nadie de la Federación coaccionó. El que no ha tenido vida en paz ni tranquilidad y el que se ha quedado en la calle y defenestrado he sido yo".
Además, señaló a las tres jugadoras que pidieron la cabeza de Vilda. "Querían que me cargara a Vilda, porque estaban cansadas, no llegaba el mensaje. Las tres capitanas. Tuve una llamada a tres bandas con Irene Paredes, Alexia Putellas y Patri Guijarro y me pidieron la cabeza de Vilda.
Gestión en la Federación
Asimismo, Rubiales presumió de gestión en la RFEF. "Cuando yo llego hay 40.000 licencias y cuando me marcho hay 100.000. Cuando yo llego no hay entrenadores asalariados. Contratamos entrenadores, médicos, cocineros. Cuando yo llego al Mundial el primer día contrato un segundo cocinero. Cuando las capitanas me piden que quieren estar cerca de lo que le dan a las inglesas... a ellas le daban 10.000 libras y yo les doy 15.000 euros. Ellas querían que me cargara a Vilda. Fue una llamada de las tres capitanas que me pidieron la cabeza de Jorge Vilda".