Opinión (muy) tardía de la epopeya de Bo Cruz y Stanley Sugerman en ‘Garra’

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Opinión (muy) tardía de la epopeya de Bo Cruz y Stanley Sugerman en ‘Garra’
Juancho Hernangómez y Adam Sandler en un fotograma de 'Garra' (2022).
Juancho Hernangómez y Adam Sandler en un fotograma de 'Garra' (2022).
Profimedia
Adam Sandler (56) y Juancho Hernangómez (27) protagonizan ‘Garra’ (‘Hustle’ en inglés), la que pretendía ser la película deportiva que marcase esta década. Con el revuelo creado tras su estreno en junio de 2022 superado, en Flashscore.es nos hemos sentado a verla y han salido estas conclusiones.

Con algunas opiniones que apuntaban a estar ante una de las mejores películas deportivas de todos los tiempos, me puse ante la pantalla con el ‘hype’ por las nubes. Las circunstancias me impidieron verla antes, por lo que la expectación era aún mayor.

La presencia de LeBron James (38) entre los productores también garantizaba que muchos de sus amigos estarían en el reparto y que se haría un largometraje de baloncesto realista. En ese aspecto cumplió, pero más allá de eso, el film me dejó frío.

Ni siquiera es una buena historia de superación, algo que en Hollywood saben hacer a las mil maravillas. El argumento es flojo, la trama poco coherente y los cameos no dan para levantarla. Posiblemente sea más interesante la historia del modo ‘Mi Carrera’ del NBA 2K que las dos horas que dura ‘Garra’.

Es raro que Adam Sandler haya hecho un trabajo de tan poca altura. Hasta ‘El Clan de los Rompehuesos’ tiene un guion mejor. Para empezar, es absolutamente inverosímil creer que su personaje, Stanley Sugerman, reclute a Bo Cruz en una cancha de Mallorca llena de gente viendo a cuatro chavales encestar la pelota.

Incluso el título está mal elegido. La garra no se ve por ningún sitio. A Juancho Hernangómez le sacan de su casa, le meten a un hotel de cinco estrellas con todo pagado y entrena con los mejores profesionales para participar en un NBA Combine al que le meten enchufado. 

Da la sensación de que a la hora de construir el relato alguien se olvidó de investigar para darle un poco de credibilidad a todo. Queriendo homenajear a Rocky Balboa, a Bo Cruz le pusieron a subir una cuesta en un tiempo ridículo que ni el mismísimo Eliud Kipchoge (38) sería capaz de lograr. Mira que me gustan las americanadas del “si quieres, puedes”, pero esto es demasiado. 

Van dejando pinceladas que, por falta de profundidad, convierten la película en un batiburrillo de ideas inconexas entre las que destacan los problemas con la justicia del protagonista. Ni siquiera con eso hacen dudar al espectador de cómo acabará la cosa, ya que rápido le salva uno de esos señores que le limpian los trapos sucios a los Philadelphia 76ers.

María Botto (48) es de lo poco salvable. Es una pedazo de actriz. Una lástima que sus diálogos no sean todo lo buenos que debieran. También se agradece la aparición de leyendas del baloncesto callejero y otras estrellas como Chris ‘Lethal Shooter’ Matthews o Grayson ‘the Professor’ Scott.

Suspenso claro

En definitiva, ‘Garra’ no pasa del 4/10 siendo muy generosos. Pusieron todas sus esperanzas en llenar la pantalla de superestrellas de la NBA y se dejaron por el camino hacer una buena película. Por cierto, queda claro que en Estados Unidos siguen confundiendo a los españoles con los sudamericanos. Cuando Stanley Sugerman visita Mallorca todos hablan con acento latino.

Sin duda, está muy lejos de competir por un puesto de honor con clásicos del cine deportivo como ‘Coach Carter’ (2005), ‘Camino a la Gloria’ (2006), ‘Hoosiers: más que ídolos’ (1986) o ‘Remember the Titans’ (2001). La cultura del momento le dio a ‘Hustle’ más crédito del que merece.