Como si de una comedia romántica neoyorkina se tratase, el partido entre Francia y Polonia parecía tener un guion ya preestablecido, pero el conjunto dirigido por Czesław Michniewicz trató de cambiar el género de la película y sorprender con una presión alta para incomodar a Hugo Lloris que a punto estuvo de dar sus frutos. Apenas fue un espejismo porque Antoine Griezmann y compañía empujaron de forma progresiva, y desde muy temprano, a un rival organizado de forma clara con un 4-5-1.
El primer remate lo protagonizó Raphaël Varane, un cabezazo muy desviado en una acción a balón parado, mientras que Aurelien Tchoauméni, el primer amonestado, se encargó de probar a Wojciech Szczęsny con un disparo muy lejano. La realidad es que los de Deschamps, con un plantel muy superior en lo que a calidad se refiere, focalizaron en las bandas, con Ousmane Dembélé juguetón y Kylian Mbappé amenazante, para desarbolar el muro instalado por los de Europa del Este.
La ley de Giroud
Olivier Giroud amenazó media hora después del pitido inicial. Un fallo en la salida permitió al extremo del Barça encarar y asistir al delantero, que no culminó bien porque ese pase llegó con mucha fuerza. Más clara todavía fue la triple ocasión de Polonia: Zielinski remató a bocajarro, Lloris paró a través de las piernas y Varane, después de que otro defensa rechazara, salvó bajo el larguero lo que parecía el 0-1. Entretanto, un asistente del cuerpo técnico le quitaba a Koundé un colgante que nadie sabe por qué lo llevaba.
Con ganas de hacer historia y de ser el único rey francés, aunque ya sabemos cómo acabó algún que otro monarca, el delantero del Milan se convirtió en el máximo goleador nacional de todos los tiempos (52), gracias a un fantástico pase de Mbappé, y destronó al legendario Thierry Henry (51). Jakub Kamiński lideró el arreón de los suyos y el guardameta del Tottenham amagó con ser el protagonista negativo de los octavos de final al dejar escapar el esférico cuando lo tenía claramente controlado.
La segunda mitad fue por otros derroteros porque el resultado provocó que hubiera muchos más espacios entre los centrocampistas y los zagueros de la selección comandada por Michniewicz. El Griezmann más hedonista se divirtió sobre el césped, bastante participativo durante los 90 minutos, y, por momentos, su imagen contrastó con la del crac del PSG, algo más frustrado de lo normal... hasta que marcó. Sentimiento similar experimentó Giroud cuando el árbitro anuló, por falta previa a Szczęsny, su gol de chilena a puerta vacía.
El festival de Mbappé
Poco después del paso por vestuarios, Kylian acarició el que hubiese sido su cuarto tanto en este Mundial, con algo de fortuna porque rebotó en un defensa, pero no necesitó ninguna ayuda extra para, en efecto, instalarse en lo más alto de la tabla de goleadores, ahora en solitario, con un disparo espectacular ante el que nada pudo hacer el portero de la Juventus. Sin restar méritos al ex del Mónaco, parte de culpa la tuvo Dembélé, mucho más certero de lo que frecuenta tanto en el timing como en la toma de decisión.
No había dicho todavía su última palabra el bueno de Mbappé, que aún tenía otro regalo preparado para los amantes del buen fútbol. De nuevo, en una acción similar al 2-0, disfrutó de más tiempo del que necesita normalmente y colocó el balón en el palo largo para firmar su quinta diana en el torneo. Fiesta parisina con la Marsellesa de fondo y con Lewandowski como infiltrado porque el ariete marcó, desde los once metros y tras fallar uno segundos antes (Lloris se adelantó y varios jugadores entraron antes de que lanzara), el gol del honor en la última acción del duelo.
Polonia se marcha de Catar con los deberes hechos porque logró el objetivo de superar la fase de grupos, aunque con muy poco brillo, y con buenas sensaciones pese al resultado de este domingo tras firmar una actuación más que digna e incluso gozar de opciones para dominar en el tanteador. La cara alegre, por supuesto, la protagoniza el combinado comandado por Deschamps, que se medirá a Inglaterra o Senegal en los cuartos de final de un Mundial que busca revalidar.
Jugador Flashscore del partido: Mbappé.
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