En el primer partido tras el parón por las selecciones, el Nápoles logró imponerse en el campo del Atalanta, ganando 1-2.
Las formaciones
En su regreso al banquillo del conjunto de Campania, Walter Mazzarri optó por el 4-3-3 heredado de Luciano Spalletti y Rudi García, tal y como anticipó en la rueda de prensa.
Ante la ausencia de Victor Osimhen en el 11 inciial, entró Giacomo Raspadori en el centro del ataque. Alex Meret sigue de baja y le sustituyó Gollini, ex de la Dea.
En el Atalanta, son baja Juan Musso, Maarten de Roon y Gianluca Scamacca.
El partido
El Nápoles tuvo la posesión del balón en la primera parte y fue más peligroso que el Atalanta. De hecho, abrió brecha poco después de la media hora de juego.
El primer gol de la nueva era Mazzarri llegó de la mano de Amir Rrahmani, que se introdujo en el área y marcó de cabeza tras una asistencia de Raspadori, pero el tanto fue anulado por fuera de juego.
Pocos minutos después, Khvicha Kvaratskhelia deshizo el empate: el georgiano logró eludir la marca de Giorgio Scalvini y remató de cabeza un centro desde la derecha, botado por Giovanni Di Lorenzo. Una forma de anotar poco habitual en el georgiano pero igual de efectiva.
Lesión de Olivera
Davide Zappacosta y Mathias Olivera fueron sustituidos por lesión: entraron Hans Hateboer y Juan Jesús. Lo del uruguayo tiene mala pinta después de que se le fuera la rodilla y saliera del terreno de juego en camilla.
El Nápoles tuvo una buena ocasión para doblar antes del descanso, no supo aprovecharla y fue castigado a los ocho minutos de la reanudación con otro gol de cabeza, obra de Ademola Lookman: el nigeriano aprovechó un centro de Hateboer y dio el empate a su equipo.
Mazzarri intentó revitalizar a su equipo en el minuto 62 lanzando a Eljif Elmas y Osimhen al terreno de juego.
Sin embargo, fue Mario Pasalic quien marcó, pero el 2-1 del Atalanta fue anulado por fuera de juego de Teun Koopeminers.
Pasaron los minutos y el equilibrio lo rompieron los dos nuevos fichajes: un error de Marco Carnesecchi permitió al nigeriano servir al macedonio, que adelantó inesperadamente a los campanos.
Los jugadores del Atalanta reclamaron un penalti por falta sobre el suplente Luis Muriel, pero no pasó nada más, y el partido acabó con victoria visitante de los partenopei.
Con esta victoria, el "nuevo" Nápoles de Mazzarri llegará con la moral alta al Santiago Bernabéu el próximo miércoles en el encuentro correspondiente a la quinta jornada de la fase de grupos de la Champions League.