Antes de este miércoles, el Inter había ganado sus partidos en las cinco jornadas anteriores y parecía camino de una sexta victoria ya que se puso por delante en el marcador con un gol del neerlandés Denzel Dumfries (45+1).
En el 54, Nedim Bajrami igualó al sorprender desde lejos a Yann Sommer. Ese tanto paralizó a los 'nerazzurri' y Domenico Berardi hizo enmudecer San Siro al firmar el segundo de los visitantes en el 63.
Pese a cuatro cambios simultáneos en el 68, entre ellos el de la entrada de Alexis Sánchez por Marcus Thuram, los jugadores de Simone Inzaghi fueron incapaces de reponerse y evitar la derrota.
"Perder ante nuestro público nos hace daño. Hay que entender qué ha pasado, aunque el calendario, con un siguiente partido ya el sábado, no nos deja mucho tiempo", lamentó Inzaghi.
El Sassuolo logró así dar su segundo gran golpe consecutivo, después de haberse impuesto 4-2 a la Juventus el fin de semana.
El Inter se queda con 15 puntos y mantiene el liderato por una mejor diferencia de goles (+12 contra +5) respecto al AC Milan (2º), que le da alcance gracias a su victoria de este miércoles por 3-1 en el campo del Cagliari (20º).
Remontada en Cerdeña
El Cagliari, en busca de su primera victoria de la temporada, se puso por delante gracias a Zito Luvumbo (minuto 29), que aprovechó una falta de entendimiento de la defensa lombarda para anotar ante Marco Spotiello.
Ese gol despertó al Milan: Noah Okafor envió a la red del equipo sardo un balón repelido por Boris Radunovic en una centro de Christian Pulisic (40).
En el tiempo adicional de la primera parte, Fikayo Tomori amplió la cuenta de los 'rossoneri' (45+1).
El Milan se puso definitivamente a resguardo a la hora de juego, gracias a Ruben Loftus-Cheek (60).
Después de este quinto éxito en seis partidos, el AC Milan parece confirmar que su revés de hace diez días ante el Inter (5-1) en el derbi fue un accidente.
Es además la victoria número 200 en Serie A del entrenador Stefano Pioli, que aplaudió la actuación de su equipo: "Hemos merecido la victoria en un partido que no era un simple formalismo", insistió el técnico italiano, que lamentó la "inocencia" de su equipo en el tanto que concedió.
"Sabemos que son los partidos ante nuestros rivales directos (por el título) los que cambiarán la clasificación, pero estos partidos que, sobre el papel, parecen fáciles serán muy importantes al final de temporada", subrayó.
Osimhen calma la tormenta
Por su parte, el campeón, Nápoles, después de una derrota y dos empates, se reencontró con la victoria con un 4-1 al Udinese, gracias sobre todo al nigeriano Victor Osimhen, que firmó su cuarto tanto de la temporada (minuto 39), y del georgiano Khvicha Kvaratshkhelia (74), que puso fin a una sequía anotadora de 190 días.
Osimhen, máximo goleador de la Serie A la pasada temporada, estaba especialmente seguido de cerca. El domingo, el atacante nigeriano mostró su descontento en el momento de su sustitución, criticando las decisiones tácticas de su entrenador, el francés Rudi Garcia.
El martes, su agente amenazó al Nápoles con acciones judiciales por haber publicado en la cuenta TikTok del club un vídeo, que después fue borrado, riéndose del atacante por haber fallado un penalti contra el Bolonia (0-0).
El Nápoles es ahora quinto con 11 puntos, a cuatro puntos de los dos clubes de Milán.
El Atalanta continúa su camino con buen paso y sin hacer mucho ruido: el equipo de Bérgamo es cuarto (12 puntos) después de vencer 1-0 al Hellas Verona.
En la parte baja, el Empoli, que despidió a su entrenador la pasada semana, logró su primera victoria de la temporada (1-0) ante la Salernitana para ceder el último puesto al Cagliari.