Que el Real Madrid pierda en casa siempre es noticia, pero lo es todavía más si ocurre después de haberse adelantado hasta dos veces en el marcador. El Villarreal, que se aprovechó de las muchas debilidades que tiene el conjunto blanco en defensa, se encomendó al talento de Samu Chukwueze (23) para amargarle la noche a una afición que llegaba al estadio con aires de grandeza tras la goleada en el Camp Nou (0-4), un triunfo que sirvió para lograr el pase a la final de la Copa del Rey.
José Luis Morales (35) también participó en la fiesta groguet. Volvió a quedar claro que no necesita disputar demasiados minutos para ser decisivo y tuvo su cuota de protagonismo en una victoria que deja a los suyos en la quinta posición de LaLiga Santander, con 47 puntos y manteniendo el pulso con la Real Sociedad. Además, el Comandante ha marcado seis goles en los últimos siete encuentros ligueros y es el máximo realizador del conjunto de La Cerámica en el torneo regular, en Conference y en general.
Hay que echar la vista atrás hasta el 30 de enero de 2021, hace más de dos años, para encontrar la última remontada que ha encajado el Madrid como local. Han cambiado tanto las cosas desde entonces que aquel encuentro se jugó en Valdebebas por las reformas del Bernabéu y todavía no había público debido a la pandemia provocada por la COVID-19, así que faltaba el calor el de los aficionados. Además, Eden Hazard, titular ese día, todavía tenía oportunidades como titular (eso sí, con Zinedine Zidane).
Llegaba el Levante para intentar dar la sorpresa y Morales era la principal amenaza. Los anfitriones, en cambio, encontraron a su peor enemigo en casa cuando Éder Militao vio la roja directa nueve minutos después del pitido inicial. Con todo, Marco Asensio inauguró el marcador muy poco después de empezar a jugar en inferioridad numérica. Sin embargo, el entonces capitán granota igualó recién pasada la media hora y Roger Martí anotó el 1-2 en el tramo final del partido.