Se presenta un problema y de los graves para la entidad rojiblanca. La estrella lusa, a pesar de que su deseo era seguir en Londres, no continuará como jugador Blue porque el nuevo entrenador, Mauricio Pochettino, le ha comunicado que no entra en sus planes.
De este modo, Joao Félix acabará en junio su cesión y volverá a ser a todos los efectos jugador del Atlético. El problema es que Simeone tampoco lo quiere. Y ni las declaraciones varias del portugués desde que se marchó, lanzando indirectas al técnico argentino, ni el rendimiento del equipo, que subió muchos enteros desde su salida, ayudan al portugués de cara a un posible regreso.
"El entrenador (Pochettino) no cuenta con él y ahora cuando acabe su compromiso con el Chelsea, vendrá aquí y veremos qué es lo que pasa. No tenemos nada previsto", reconocía Enrique Cerezo, dirigente del club rojiblanco en El Chiringuito.
Se había enterado pocas horas el presidente de que el Chelsea no iba a intentar prolongar su estancia, por lo que aún no ha hablado sobre el encaje o las posibles salidas de Joao Félix.
Morata como ejemplo
No es el primer caso de futbolista que sale del equipo por desavenencias con el entrenador y, al final, termina volviendo y siendo importante. El último ejemplo en el Atlético es Álvaro Morata. Sin ser titular indiscutible, ha seguido marcando goles y sido uno de los referentes ofensivos, especialmente en la primera parte de la temporada.
Si finalmente Félix ha de continuar en el Metropolitano, ya tiene espejo donde mirarse para dar la vuelta a la situación.