Luis Pérez (28) sufre una rotura completa del tendón de su aductor izquierdo, lesión que se produjo durante el partido que disputó el Real Valladolid contra el Rayo Vallecano. Se tuvo que retirar en camilla, una circunstancia que, sin duda, ya da una pista respecto a lo que cabe esperarse. Con tan poco tiempo para que termine la actual edición de LaLiga Santander, sus posibilidades de poder disputar algún minutos en el presente curso se reducían de forma drástica. Y ahora, claro, ya no tiene ninguna.

El Pucela ha confirmado este miércoles que las pruebas diagnósticas practicadas han confirmado "la previsión inicial". Los servicios médicos han tardado más de lo habitual en poder examinar la lesión del futbolista y, por tanto, en obtener los resultados. El motivo no es otro que el hecho de que tenía "una gran cantidad de líquido", de modo que no se le podía realizar "una resonancia fiable en la zona". Estará varios meses en el dique seco y habrá que ver cuál es su estado al inicio de la próxima campaña.

Cabe destacar que el ex del Tenerife renovó su contrato con el club hasta el 30 de junio de 2025. La confianza en el zaguero parece total porque en ese momento acababa de ser operado de osteopatía de pubis, motivo por el cual estuvo tres meses sin jugar. Vivió su mejor mes en febrero, cuando completó cuatro partidos de forma consecutiva (una victoria, un empate y dos derrotas). Cierra la campaña 2022/23 con 19 participaciones -una asistencia y dos tarjetas amarillas-.

Paulo Pezzolano tiene más de una preocupación en este sentido, ya que hace poco conoció la ausencia de Selim Amallah, que empezaba a encontrar su sitio, hasta verano. Además, Mohamed Anuar lleva en la enfermería varios meses y Darwin Machís sigue sin gozar de regularidad. Hay algún que otro jugador tocado (concretamente Álvaro Aguado, Joaquín Fernández y Martin Hongla), pero se espera que puedan estar disponibles para la cita ante el Sevilla. Los siguientes escollos serán Cádiz, Barça, Almería y Getafe.