Novak Djokovic, que ha exhibido una longevidad sin par en la cima del tenis, sucede a Roger Federer como el número uno más veterano de la historia. De hecho, la mitad de sus 24 Grand Slams los ha conseguido después del 22 de mayo de 2017, cuando alcanzó la treintena. En este lapso de tiempo ha levantado un total de 31 títulos, incluyendo también una cuarta parte de los Masters 1000 que tiene en su haber, es decir, una decena de esos 40.

El serbio se estrenó en ese lugar de privilegio el 4 de julio de 2011, a la edad de 24 años. En este aspecto, sus grandes rivales del Big 3, el propio jugador suizo y Rafa Nadal, fueron algo más rápidos, ya que ambos lo consiguieron a los 22. Carlos Alcaraz, en cambio, llegó al ansiado trono mucho antes que todos los citados (fue en septiembre de 2022 y aún era un adolescente, ya que sólo tenía 19).

Respecto al mencionado Federer, hay una diferencia muy sustancial, ya que el helvético dominó el deporte de la raqueta durante un total de 310 semanas -la ventaja es de 109 a la fecha de este artículo-. Su obsesión por el bienestar físico y mental (la cuidada nutrición y la práctica de yoga y de meditación son algunos de los ingredientes en su exitosa receta) le ha permitido dar continuidad a su versión más excelsa. 

El de Belgrado, que en febrero de 2023 superó a Steffi Graf para hacerse con el récord de más semanas en lo más alto con independencia del género, se acabará despidiendo de ese puesto en algún momento. La gran pregunta es la siguiente: ¿Cúanto tiempo aguantará ante el empuje de jóvenes como Alcaraz o Sinner? Esta fuente de motivación, sin lugar a dudas, se traduce como un estímulo para seguir buscando la exigencia.