Fichaje ACB: El Casademont Zaragoza firma a Bell-Haynes

Publicidad
Publicidad
Publicidad
Más
Publicidad
Publicidad
Publicidad
El Casademont Zaragoza anuncia el fichaje del base canadiense Bell-Haynes
El Casademont Zaragoza anuncia el fichaje del base canadiense Bell-Haynes
El Casademont Zaragoza anuncia el fichaje del base canadiense Bell-Haynesacb Photo / V. Carretero
A la espera de que comiencen las semifinales de la ACB este martes, hay equipos que ya han comenzado a planificar la próxima temporada. Es el caso del Casademont Zaragoza, que a la espera de saber qué pasará con su conflicto con Aday Mara, ha cerrado el fichaje de Bell-Haynes, un base canadiense clave con la experiencia en España.

"Desde el principio estamos buscando jugadores que conozcan la liga. En el caso de Haynes no sólo conoce la liga sino también la competición europea. Es un jugador que tiene ambición, que viene con mucha ilusión. Nos va a dar la capacidad de poder jugar con los dos bases juntos porque buscamos poder tener también ese equilibrio". Quien así habla es Porfirio Fisac, técnico del conjunto maño, sobre su nueva incorporación para la próxima campaña. 

Para el técnico se abre una amplia gama de sistemas con los que jugar con Bell-Haynes. "Para nosotros es un fichaje importante porque es un jugador vertical, que tiene capacidad para anotar, capacidad para dirigir. Es un muy buen jugador de equipo que, además, no rehúsa para nada asumir tiros importantes".  

El norteamericano ya demostró en España parte de sus virtudes. Fue en las filas del Río Breogán, con el que firmó un promedio de 12.9 puntos y 4 asistencias. Pero su evolución desde entonces ha sido formidable. Sigue con su capacidad de anotación mostrada en su etapa universitaria en Vermont, pero ha añadido otras habilidades: penetraciones, mejor selección de tiro y capacidad para dirigir el juego. 

Un combo peligroso cuando la pelota quema

En el Casademont Zaragoza destacan "su capacidad como director de juego", que se traduce "en un promedio que habitualmente se sitúa por encima de las 4 asistencias por partido y su capacidad para sacar faltas personales, unido a un consolidado 85% en el tiro libre, le convierte en un mal enemigo para los minutos finales. La visión de juego también le acompaña en defensa: su atención constante a la línea de pase le trae alegrías con un robo por partido como promedio".