Vitoria es un punto de referencia del baloncesto español y europeo. El Baskonia ha ganado cuatro veces la Liga ACB, ha estado en seis ocasiones en la Final Four de la Euroliga, incluidas dos finales, y la ha organizado en 2019: la capital del País Vasco goza de una brillante reputación. Sin embargo, a pesar de su identidad, representada por José Antonio Querejeta, ex jugador del club que también es propietario del Deportivo Alavés en fútbol, el Baskonia se encuentra en la increíble situación de tener sólo dos jugadores españoles en sus filas, en un papel inexistente.
93,3% de extranjeros
8 minutos y 23 segundos: ese es el tiempo que ha jugado Dani Díez en la Euroliga esta temporada. Fue ante el Zalguris Kaunas en la cuarta jornada, en la derrota en casa de los lituanos (99-82). En octubre, la FIBA publicó su informe anual y el club vitoriano contaba con un 93,3% de jugadores extranjeros en su plantilla, lo que le situaba a la cabeza de la clasificación mundial. Incluso comparado con las cifras de la Liga ACB, donde el 70% de los jugadores no son españoles (220 jugadores de todas las nacionalidades), el Baskonia está muy por encima de la norma. Además de Díez, Joseba Querejeta, de 20 años, no ha jugado en toda la temporada.
Como muchos países europeos, España está viendo cómo sus talentos cruzan el Atlántico, y la liga local, pese a ser la más potente de Europa, sólo tiene un 8% de jugadores menores de 21 años. La Liga es un imán, pero el hecho de que los jugadores se marchen cada vez antes a las universidades estadounidenses está limitando el número de jugadores que pueden llegar al draft de la NBA. No obstante, el Real Madrid cuenta con leyendas como Sergio Llull y Rudy Fernández, además de jugadores de futuro como Hugo González (17 años) y Eli Ndiaye y, también, Alberto Abalde que fue traspasado del Valencia Basket , suma 19 internacionalidades con España y participó en los Juegos Olímpicos de Tokio. La situación es muy parecida en el FC Barcelona, con la vuelta a casa de su estrella Willy Hernangómez, el consagrado Álex Abrines, Oriol Paulí (19) y los jóvenes Michael Caicedo (20) y Joel Parra (23). Por último, el Valencia encabeza la tabla con 7 jugadores de la cantera.
Una situación sin precedentes
Si bien es normal que grandes clubes como el Real Madrid o el Barça dispongan de un amplio abanico de nacionalidades, no lo es tanto que un club vasco juegue prácticamente sin jugadores de la cantera. La región brilla por la calidad de su fútbol formativo; en cambio, cuando se trata del balón naranja, la situación es totalmente opuesta. Ya en 2016, la prensa local se escandalizó al comprobar que sólo jugaban tres vascos en toda la liga, y que el Baskonia no contaba con ningún español en sus filas. En 2017, el derbi contra Bilbao Basket Bilbao contó con 24 jugadores de 17 nacionalidades, pero solo un español.
La tendencia va a continuar, también en el banquillo, donde la marcha de Joan Peñarroya se ha visto compensada con el regreso del montenegrino Dusko Ivanovic , que ocupa su puesto en el banquillo del Baskonia por... 4ª vez (2000-2005, 2008-2012, 2019-2021), con un pasado glorioso en Vitoria que incluye tres títulos de Liga (el último en 2020 durante la pandemia COVID, disputada en una burbuja), cuatro Copas del Rey y una final de Euroliga en 2005.
Aquí también hay una excepción, ya que los otros tres clubes españoles de la máxima competición europea tienen a un nacional como entrenador y todos terminan en el podio de la Liga. De momento, sin embargo, este crisol de culturas no garantiza el regreso al Top 8 europeo, ni siquiera la clasificación para los play-offs de liga, ya que el Baskonia es actualmente 12º tras nueve jornadas.