El centrocampista de 21 años del Benfica portugués, cuya camiseta pasó a vestir el pasado verano tras su traspaso desde su anterior club nacional, River Plate, también se está haciendo notar por fin en el Campeonato de Catar.
Tras su gol como suplente en la importante victoria por 2-0 contra México, se confió en él como titular en el duelo contra Polonia y dio una asistencia del gol en el tanto de Julián Álvarez. Jugó los 90 minutos por primera vez contra Australia en octavos y volvió a marcar, aunque esta vez en su propia portería, pero nadie pareció darle mucha importancia.
"Enzo Fernández ya es un centrocampista de élite con el balón, tanto por su técnica como por su percepción del juego. Sabe exactamente cuándo acelerar, cuándo retener el balón o cuándo elegir una solución creativa. Tiene una técnica fantástica para golpear el balón, que se demuestra en sus disparos como pudimos ver durante el partido contra México", comentó Jan Říha, ojeador jefe de 11Hacks, que ofrece una visión de las habilidades de Fernández.
En el Benfica, Fernández juega en la pareja de centrocampistas con Florentino Luis y asume el papel de conductor del juego. De media, da 97 pases por partido, claramente el que más de toda la liga portuguesa.
Basándose en modelos de datos avanzados, sus pases son los más beneficiosos en términos de cuánto aumentan las posibilidades de marcar de un equipo. Y en Portugal no se ve a ningún otro jugador dar pases en profundidad con tanta frecuencia como al argentino. Puede que no domine tanto en cuanto al peligro de las acometidas, pero sigue siendo uno de los mejores jugadores.
Aunque las situaciones estándar son cosa de João Mário y David Neres, Fernández realiza una media de 4,5 centros al área durante los partidos y tiene el mayor porcentaje de acierto de la liga.
En el último tercio del campo, crea principalmente a través de pases penetrantes al centro del área desde la zona 14 (el espacio central frente al área contraria), pases en diagonal desde el centro del campo o mediante pases desde el centro del campo al área.
"Además, para ser un jugador tan tipológicamente técnico, a menudo intenta entrar en los duelos, detener las acciones del adversario y recuperar el balón. Un jugador enormemente versátil que puede hacer cualquier cosa en el fútbol moderno", añade Říha.
En el Benfica, Fernández intenta ganar el balón mostrándose activo ante el rival una media de 4,5 veces por partido, más a menudo que el 95% de los demás centrocampistas.
También ha participado activamente en duelos con su país natal. Si contamos el conjunto de absolutamente todos los duelos a los que se somete un jugador en el campo, estuvo entre el 10% de los más activos.
Aunque el excompañero de Fernández, Julián Álvarez, ha sido la comidilla este año en relación con los traspasos de Argentina a Europa, el habilidoso centrocampista del Benfica ha tenido un impacto aún mayor en el funcionamiento de su equipo en el fútbol de clubes. Y su valor para Argentina también parece crecer a pasos agigantados.