REAL MADRID-ANADOLU EFES 94-85
Le tenían ganas los hombres de Chus Mateo a este encuentro. Por enfrentarse al equipo que le arrebató la pasada Euroliga y por superar la minicrisis de juego y resultados que andaban arrastrando.
Todo eso se notó desde el salto inicial, cuando Musa y Yabusele camparon a sus anchas cerca del aro para abrir la primera buena diferencia al final del primer cuarto (26-19). A ellos dos se sumaron Poirier y Corniele, pero también los turcos tenían sus armas. Y los ejecutores para mantenerlos en el partido fueron Clyburn (25 puntos) y Zizic (23 puntos).
No les daba, sin embargo, para recortar distancias, que ya superaba la decena al descanso (54-43) gracias a un triple desde su media cancha de Llull.
Suele pasar que, entre la confianza viéndose casi con 20 puntos de diferencia, y que el rival no es manco, que el encuentro se apretó tanto que se temió por la victoria. De toda la ventaja que había, sólo quedaban 2 puntos en la recta final. Fue cuando apareció Hanga (19 puntos), junto a Llull, para que el triunfo se quedase en Madrid por 94-85.
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MACCABI-BARCELONA 79-86
Mucho mérito tuvo también lo obtenido por el Barcelona en el infierno de Tel Aviv, donde ningún equipo había ganado esta temporada. Pero los de Jasikevicius utilizaron bien sus armas, con Laprovittola otra vez perfecto en la dirección y anotación, y con un finísimo Cory Higgins, que anotó 11 de sus 15 puntos en el último cuarto. Cuanto más quema el balón, más lo pide para ser decisivo.
Fue un duelo muy físico, que requirió lo mejor de los azulgrana. Las ventajas iban cambiando de bando sin que ninguno pudiese escaparse. Los primeros diez minutos fueron más del Barça, con un Laprovittola excelso en el tiro exterior (20-23). Pero los israelíes, con el español Lorenzo Brown y Wade Baldwin al mando, aumentaron su agresividad defensiva y recuperaron la iniciativa antes del descanso (43-40).
Había que hacerlo mejor, y sumar más armas para poder superar al Maccabi. Las tuvo el Barça con Abrines ayudando en ataque y una mayor colaboración en defensa de Tobey y Vessely en la zona.
Con 61-62 empezó el último cuarto y ahí fue donde Higgins dijo que iba a ganar el encuentro. 11 puntos suyos abrieron el hueco definitivo para consolidar el triunfo azulgrana por 79-86.
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