Simone Biles, ya laureada por equipos y en el concurso general esta semana, logró una nota excepcional de 14,800, seguida por la joven china de 17 años Yaqin Zhou (14,700).
La brasileña Rebeca Andrade, que había derrotado a Biles la víspera en la final de salto, completó el podio (14,300).
En una final de alto nivel, la texana encadenó acrobacias con precisión milimétrica, pero su rival también se mostró impresionante y perdió el oro por un pasito atrás al apearse de la barra de equilibrio, penalizado con una décima de punto.
Minutos después, la estadounidense se impuso en suelo con 14,633 puntos. Las brasileñas Rebeca Andrade (14,500) y Flavia Saraiva (13,966) completaron el podio.
Biles suma ahora 23 títulos mundiales y 30 medallas. Ha firmado un regreso estelar al máximo nivel internacional tras lo ocurrido en los JJ.OO. de Tokio, marcados para ella por los twisties, pérdidas brutales de las referencias en el espacio.
Después, cortó por completo con la gimnasia y no regresó a la competición hasta el pasado agosto en Estados Unidos.