Karen Khachanov (26) ya está entre los cuatro mejores del Open de Australia. Seguramente le hubiese gustado terminar de otra forma y celebrarlo con el toque de épica que ofrece un gran punto, pero su objetivo era pasar a las semifinales y lo ha conseguido. Además, el partido duró menos de dos horas y es muy poco probable que su próximo rival (Stefanos Tsitsipas o Jiri Lehecka) pase a la seguiente elimnatoria con tan poco desgaste. Ambos se enfrentarán este mismo martes.
Es complicado de saber, problemas físicos aparte, qué hubiera ocurrido si el tie break (7-5) de la manga inaugural hubiese caído del otro lado. El tenista ruso consiguió anotar siete puntos mediante aces y también cometió casi la mitad de errores no forzados (ocho frente a 15). Cabe destacar que llegó a ponerse 3-0 tras romperle el saque a su oponente en el segundo juego, pero todo se le complicó cuando ganaba por 5-2 y parecía tener el 1-0 casi asegurado. Korda salvó dos bolas de set, no así la tercera.
El americano evitó tres puntos de break entre el primer y el tercer juego al principio del siguiente set, pero perdió el servicio cuando reinaba la igualdad (3-3) y volvió a sufrirlo justo después, antes de estar cerca (hasta en dos ocasiones) de devolverle la jugada a su rival. Al final, 6-3 y encuentro más que encaminado, sobre todo porque el ya jugador eliminado empezó a sufrir los problemas en la muñeca minutos atrás, por lo que la derrota parecía casi inevitable y, aquejado por esos dolores, optó por la retirada.
Kachanov accede de nuevo a las semis de un Grand Slam, como consiguió en el US Open, e intentará llegar por primera vez en su carrera a una final. La medalla de plata lograda en los Juegos Olímpicos de Tokio (perdió contra Alexander Zverev en la lucha por el oro) es uno de sus mayores logros hasta la fecha, aunque ahora tiene la oportunidad de escribir un nuevo capítulo en su trayectoria.
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