Karim Benzema, flamante Balón de Oro de 2022, brilló con luz propia durante la pasada campaña. Marcó goles, ganó títulos y desplegó su mejor fútbol desde que llegó al Real Madrid. Con ese bagaje, todo el mundo estaba ilusionado por ver al francés jugando su último Mundial con Francia.

Sin embargo arrancó la presente campaña y la llama se fue apagando. La falta de continuidad provocada por las lesiones y un Didier Deschamps (54) como loco por dejarle fuera de Catar 2022 le privaron de pelear por el sueño de ganar la Copa del Mundo.

Con la resaca mundialista superada, vuelve LaLiga de la mano una jornada de fin de año. Encuadrado en esa fecha se disputará un Valladolid - Real Madrid en el que Karim tendrá la oportunidad de reivindicarse y demostrar que los últimos meses malos no han sido más que un espejismo.

Por suerte, el jugador blanco liderará a su club, en el que es capitán, se siente cómodo y todos le respetan. El duelo en Pucela debería ser la piedra de toque que necesita el de Lyon para afrontar un segundo tramo de temporada apasionante en el que los merengues disputarán la Supercopa de España, el Mundial de Clubes y, como mínimo, los octavos de final de Champions League contra el Liverpool.

Para contar con garantías a la hora de encarar la parte importante del curso, el Real Madrid necesita al mejor Benzema. Todos confían en él y seguro que pondrá todo de su parte para devolver esa confianza. Seguro que irá con el colmillo afilado en la cita del José Zorrilla.