Después de superar el reconocimiento médico, Joao Félix ya se puede considerar a todos los efectos futbolista del Chelsea hasta el próximo 30 de junio. A partir de ahí deberá volver a la disciplina del Atlético, pues la cesión es sin opción de compra.
A pesar de las públicas y notorias diferencias entre Simeone (52) y el jugador, el club rojiblanco no quiere perder o malvender a su estrella y perder gran parte de los 120 millones de euros que le costó sacarlo en 2019 del Benfica.
Las ofertas que han llegado en este mercado invernal por traspasarlo no han sido lo suficientemente buenas para ser consideradas por el Atlético. Esta operación, si Joao Félix es capaz de rendir a buen nivel, puede aumentar su caché de cara a una venta definitiva ya en verano.
De momento, el Atleti, que necesita reducir drásticamente sus gastos, se ahorrará la parte proporcional de su ficha, unos 4 millones de euros brutos en estos cinco meses. Además, ingresará también unos 7 millones de euros aproximadamente por la cesión. Esto hace que la operación le cueste al Chelsea alrededor de 11 millones por contar con el internacional luso.
La entidad madrileña, al que sólo le quedan LaLiga y la Copa tras su fracaso europeo, ya vendió (cesión con cláusula obligatoria de compra de 50 millones de euros) a Matheus Cunha al Wolverhampton, con el que ya ha jugado dos partidos sin marcar aún. Ahora, sin Joao Félix, el Cholo se queda con Morata, Griezmann, Correa y Pablo Barrios como jugadores que pueden ocupar el lugar del portugués en el campo.