El último partido del año para el Nápoles y el Monza terminó 0-0.
Un resultado que, desde luego, no hace feliz al entorno de Campania, que vuelve a ponerse a cinco puntos de la cuarta plaza, momentáneamente ocupada por la Fiorentina. Para los lombardos es el tercer partido sin marcar.
Formaciones
Muchas ausencias tuvieron que afrontar los dos entrenadores: en el tridente del Napoli, sin Victor Osimhen y Matteo Politano estaban Giacomo Raspadori y Alessio Zerbin.
Con emergencias defensivas en el Monza, Roberto Gagliardini jugaba de central, mientras que Andrea Colpani empezaba en el banquillo.
El partido
El primer 'huy' del partido lo provocó Pedro Pereira, cuyo disparo fue desviado por un defensa napolitano y dio un susto a Alex Meret, pero se marchó ligeramente desviado.
El Nápoles le tomó la medida al terreno de juego y se volvió más y más peligroso a medida que pasaban los minutos: primero Kvaratskhelia intentó una acción personal, y luego fue Franck Anguissa quien amenazó seriamente a Michele Di Gregorio: su inserción fue perfecta, pero su cabezazo se desvió centrado.
Cuando expiraban los cuarenta y cinco minutos, Kvaratskhelia dispuso de otra ocasión para deshacer el empate, pero su disparo se marchó fuera por poco.
El georgiano volvió a intentarlo en el minuto 10 de la segunda parte, pero tras una buena pared con Raspadori disparó flojo a los brazos de Di Gregorio.
Al Monza se unieron Birindelli, Bondo y Colpani, y fue de los pies del número 28 del Brianza cuando llegó el penalti pitado a favor de los visitantes, por un toque con la mano de Mario Rui. Fue Matteo Pessina el encargado de tirarlo, pero chutó mal, permitiendo a Meret atajar con facilidad.
El Nápoles reaccionó y creó tres buenas oportunidades en rápida sucesión con Di Lorenzo, Kvaratskhelia y Zerbin.
El partido se mantuvo equilibrado hasta el final, pero a pesar de los últimos intentos de ambos bandos (sobre todo, el de Gaetano al comienzo de la segunda parte) el encuentro acabó en tablas.
Cabe destacar las expulsiones de Mazzarri, que intervino para resolver una trifulca entre Kvaratskhelia y Bondo, y de Palladino, por reiteradas protestas.