Después de una temporada que terminó sin siquiera acceder a las copas de Europa, el Chelsea quiere salir corriendo. Y lo hará, por supuesto, a base de decenas de millones de libras. Sobre todo en ataque, donde quiere reforzarse, el equipo que dirigirá Mauricio Pochettino, llamado a reflotar un proyecto que pese al enorme desembolso de enero ha fracasado estrepitosamente, quiere aumentar el peso específico tras las llegadas de Nkunku y Jackson.
El casting incluye a dos jugadores de la Serie A y uno de la Bundesliga. Los dos primeros nombres son los de Lautaro Martínez y Dusan Vlahovic, mientras que el tercero es Randal Kolo Muani, actualmente en el Eintracht pero también en el punto de mira del París Saint Germain.
La quimera de Lautaro
Desde hace tiempo se rumorea que el Stamford Brdige ha puesto sus ojos en el capitán del Inter, que viene de una excelente temporada y representa el único elemento continuo en el ataque nerazzurro de los últimos cuatro años. Campeón del mundo y capaz de jugar tanto de delantero como de segunda punta, el ex jugador del Racing podría ser el perfil ideal para su compatriota Pochettino, que querría apostar por su capacidad para atacar en profundidad y su capacidad asociativa con otros delanteros.
Aunque parece que el Chelsea podría ofrecer algo así como 60 millones de libras, hay que valorar dos aspectos. El primero es el deportivo: los Blues están de hecho fuera de las copas de Europa y para un bombardero de 26 años que busca explotar definitivamente, esto representa un gran hándicap. El segundo aspecto se refiere a su lealtad a la causa nerazzurra: el argentino se convirtió en capitán después de que Handanovic perdiera la capitanía, y su vínculo con la afición de San Siro es absoluto. Difícil, por tanto, que él mismo quiera cambiar Appiano Gentile por Cobham.
Vlahovic por la redención
En cambio, a quien podría convencer para cruzar el Canal de la Mancha es al delantero centro del Juventus, que este año ha realizado una temporada mediocre en cuanto a números (14 goles en 42 partidos en total) y que realmente parece incapaz de plantar cara al juego y temperamento de Massimiliano Allegri. El serbio, un delantero centro de área con una fuerte cabeza, es un terminal ofensivo más estático en comparación con Lautaro, pero capaz de jugar en equipo y también como carrilero.
Su prototipo responde al del delantero clásico físicamente fuerte, un prototipo que Pochettino tuvo en el Southampton con Graziano Pellé. En el Tottenham y en el París Saint Germain, en cambio, el argentino tuvo a su disposición a Harry Kane y Mauro Icardi como delanteros centro, y es quizá este último el que tiene un perfil más similar al del serbio. El acuerdo podría cerrarse en el caso de que los Blues presenten a la Juve una oferta importante, concretamente de 50/60 millones, para que no suponga una minusvalía para los bianconeri. Y quién sabe, el jugador podría no elegir la aventura de la Premier League, a pesar de la ausencia de copas continentales.
Muani, el más asequible
El perfil más humilde es, sin duda, el del delantero francés actualmente en el Eintracht. Hablamos de un delantero centro que garantiza goles y también colaboración con los compañeros, aunque su reputación no es la de un delantero centro de élite. Sin embargo, sus 15 goles y 11 asistencias la pasada temporada en la Budesliga le convierten en una opción importante, y no es casualidad que el propio PSG esté moviendo ficha por él.
El club alemán propietario de su ficha, sin embargo, no parece dispuesto a aceptar menos de 70 millones para venderlo. Una cantidad nada desdeñable que cualquiera sopesaría antes de desembolsar. Su carácter atípico, sin embargo, podría proporcionar a Pochettino un delantero centro alternativo a medio camino entre lo atlético y lo físico. No es mala combinación, sobre todo para un equipo que necesita volver a la senda del triunfo y que puede apostar por su habilidad en el contraataque y su capacidad de atacar en profundidad para sorprender al rival.