El Arsenal fue líder de la Premier League durante gran parte de la pasada campaña, y sólo tropezó en los dos últimos meses, después de que una racha de malos resultados le apeara del liderato en favor del Manchester City.
Perdió el primer puesto por cinco puntos y dejó escapar una renta de ocho en la recta final de la temporada.
Sin embargo, fue mucho mejor de lo que cualquiera de los afiliados al Arsenal hubiera esperado al principio de la temporada, y su buen rendimiento, unido a la victoria del pasado fin de semana en la Community Shield contra el City en Wembley, hace que los seguidores de los Gunners confíen en volver a plantar cara.
Durante la campaña pasada, el Arsenal arrasó con regularidad gracias a su enigmático y joven equipo, en el que jugadores como Martin Odegaard, Bukayo Saka y Gabriel Martinelli contribuyeron con goles y asistencias a auparlo a lo más alto de la tabla.
Los astutos fichajes de Gabriel Jesus y Oleksandr Zinchenko se adaptaron rápidamente y aportaron una mentalidad ganadora al joven equipo. Los veteranos Granit Xhaka y Thomas Partey también rindieron a un alto nivel durante toda la temporada.
Pero, en última instancia, fue la falta de profundidad en la plantilla -especialmente en contraste con su rival por el título, el Manchester City- lo que les costó caro.
Mientras que el equipo de Pep Guardiola podía presumir de dos XIs de alto nivel que dejaron a los Citizens capaces de competir en múltiples frentes y asegurar su histórico triplete, las lesiones de final de temporada de estrellas como Gabriel Jesús, Zinchenko y el impresionante William Saliba acabaron por dejarlos exhaustos e incapaces de seguir el ritmo de los campeones.
Un mercado sólido
El Arsenal ha hecho frente a esta situación en el mercado de fichajes, apostando por jugadores de alto nivel que puedan competir directamente por la titularidad.
El internacional inglés Declan Rice es uno de los más destacados. El excapitán del West Ham es una nueva joya de la corona del Arsenal, con excelentes estadísticas defensivas, mentalidad de capitán y una creciente confianza en su rendimiento ofensivo. Además, el Arsenal se alegrará de haber ganado la partida al City y de que el propio jugador haya querido fichar por los de Londres.
Puede que algunos (por ejemplo, Roy Keane) se opongan a su traspaso por más de 100 millones de libras, pero otros consideran que es un precio justo por uno de los mejores talentos de Inglaterra. El tiempo lo dirá.
Jurrien Timber ha llegado del Ajax para aportar más calidad al lateral derecho, mientras que Kai Havertz aporta versatilidad y competencia en toda la delantera.
También han dejado marchar a algunos, sobre todo a Xhaka, cuya venta no sorprende, ya que se venía barajando desde hacía tiempo, pero que acababa de realizar la que posiblemente haya sido su mejor temporada con la camiseta del Arsenal. Está por ver si echarán de menos su ferocidad y su pasión, aunque sea como suplente. Sus tarjetas rojas, sin embargo, no.
Más partidos, más delanteros
Tras un largo paréntesis, el Arsenal vuelve a disputar la Liga de Campeones. Será interesante ver qué impacto tiene esto, o si en última instancia jugó un papel importante en su desafío nacional de la temporada pasada.
La temporada pasada, el Arsenal quedó eliminado de la Copa de Inglaterra a finales de enero y de la Europa League en marzo, lo que le permitió poner toda la carne en el asador en abril.
La plantilla es joven y experimentada, por lo que físicamente debería ser capaz de hacer frente a las mayores exigencias, pero los Gunners siguen sin tener la profundidad de plantilla del City o incluso del Manchester United o el Chelsea.
Da la sensación de que al club le siguen faltando uno o dos jugadores, sobre todo en la delantera.
Aunque Eddie Nketiah y Reiss Nelson desempeñaron un papel positivo la temporada pasada, apareciendo en varios momentos con goles decisivos para ganar partidos, todavía tienen mucho que demostrar para ser considerados delanteros de primer nivel, y desde luego, ninguno de los dos corre peligro de desbancar a Gabriel Jesus como titular.
Folarin Balogun ha regresado al club tras su cesión en Francia, al menos por ahora.
El delantero estadounidense marcó 22 goles en 39 partidos con el Reims la temporada pasada, por lo que sin duda valdría la pena apostar por él, pero parece que va a marcharse de nuevo, ya que clubes como el Inter de Milán están muy interesados en incorporarlo.
El Arsenal terminó la temporada con una diferencia de goles de +45, 88 a favor. Sin embargo, marcó muchos de ellos a rachas y sufrió muchísimo cuando Jesus se lesionó, y el brasileño también se perderá al menos los primeros partidos de esta campaña.
El nuevo fichaje, Havertz, tiene experiencia como delantero, pero no es que haya causado sensación en el Chelsea.
Es posible que antes de que se cierre el mercado de verano se necesite un delantero suplente sólido y fiable, posiblemente uno que ofrezca algo diferente a Jesus en cuanto a tamaño y fuerza.
Uno de los aspectos positivos de la pretemporada ha sido la buena forma goleadora de Leandro Trossard, y el belga bien podría ser el jugador clave de los Gunners esta temporada a medida que empiecen a acumularse los partidos.
Tampoco estaría de más un central. Saliba y Ben White disfrutaron de buenas temporadas, pero después de eso, sólo tienen a Gabriel y a menudo han utilizado a Kieran Tierney allí durante la pretemporada. Rob Holding no está al nivel que pretenden alcanzar, y a menudo se le señaló como punto débil cuando jugó el año pasado, sobre todo cuando se enfrentó a talentos de talla mundial como Erling Haaland.
El Arsenal encajó 10 goles más que el City la temporada pasada, y lo ideal sería que necesitase otra opción que le ayudase a acortar distancias.
Sin grandes retoques tácticos
Tácticamente, no deberíamos esperar ver grandes diferencias en el equipo de Arteta. Los ataques por las bandas y los servicios de Odegaard por el centro se mantendrán, y la contundencia en la medular carecerá del caos de Xhaka, pero mejorará con la profesionalidad de Rice.
Lo que sí podemos esperar es un poco más de pragmatismo: el Arsenal se vio obligado a remontar en varias ocasiones la temporada pasada y casi se salió con la suya en bastantes ocasiones, ya fuera mediante victorias tardías o empates rescatados.
No es una mala costumbre, sobre todo teniendo en cuenta que este año se añadirán muchos más minutos al final de los partidos (algo de lo que ya se han beneficiado en la Community Shield), pero deberán mejorar su sensatez al principio de los encuentros y no ceder ventajas.
También deben mejorar su concentración, ya que han dejado escapar algunas ventajas.
¿Siguen siendo los más inmediatos perseguidores del City?
En última instancia, Arteta y el Arsenal apuntan alto esta temporada, y con razón. Alcanzar al City sigue siendo una tarea difícil para cualquiera de los otros 19 equipos de la Premier League, pero los seguidores del Arsenal pensarán que probablemente sea el equipo mejor situado para hacerlo.
Mantener a los jugadores clave en forma y sanos durante toda la temporada será clave, al igual que lograr un equilibrio entre los rigores del fútbol de la Liga de Campeones y mantener el desafío de la Premier League.
Sin embargo, se enfrentará a un duro reto entre los cuatro primeros, con rivales de la talla del Manchester United y, con toda probabilidad, un Liverpool que se recupera, un Newcastle que ronronea, un Chelsea reconstruido y un Tottenham herido, cualquiera de los cuales podría dar la sorpresa y adelantarles. Es vital que eviten una mala racha como la de abril y mayo.
Si pueden empezar rápido y abrir una brecha en lo alto de la tabla, tendrán la experiencia de la temporada pasada en la que apoyarse y evitar repetir sus costosos errores, pero puede que se vean obligados a dar prioridad a una competición si se adentran en las últimas fases de Europa.