Chelsea, Bournemouth, Fulham y Nottingham Forest son los clubes que más veces han perdido en la Premier League a lo largo del 2023. Se quedan fuera de esta clasificación, por haber disputado menos partidos, quienes ascendieron y descendieron meses atrás. El Sheffield United, sin ir más lejos, es colista con nueve puntos; tanto Burnley como Luton, ambos en la zona roja, han llegado también a dobles dígitos en lo que a resultados negativos se refiere.
Los cuatro equipos citados al principio suman 19 derrotas, una por encima del Everton, hasta el comienzo de la decimonovena jornada. Y todavía pueden llegar a la veintena porque deben jugar un par de encuentros más. Los de Mauricio Pochettino, con un calendario muy benévolo, se enfrentarán al Crystal Palace como locales y al Luton como visitantes. Dichos rivales están peor ubicados en la tabla y son rivales que deberían ser asequibles.
Los Blues terminaron duodécimos en la pasada campaña, fuera de puestos europeos y a años luz del objetivo. Conquistar el título siempre es una tarea compleja por el elevado número de candidatos, pero se trata de una plantilla que se ha diseñado para al menos lograr plaza de cara a la siguente edición de la Liga de Campeones. Con un insuficiente balance de 22 puntos, están muy lejos (a 14 unidades) de las posiciones privilegiadas.
Aunque no son muchas las razones para ilusionarse con un 2024 más halagüeño, los aficionados pueden agarrarse a Christopher Nkunku, que debutó este domingo en el torneo doméstico y vio portería frente al Wolverhampton. Ha estado en la enfermería desde agosto y empieza a dar pasos de la mano de una entidad que desembolsó 60 millones de euros para hacerse con sus servicios tras explotar en el RB Leipzig (también militó en el París Saint-Germain).