Los hombres de Jürgen Klopp acumularon una impresionante cifra de goles esperados (xG) de 7,27, la más alta de un equipo en un partido de la Premier League desde que se empezó a registrar esta estadística en la temporada 2010/2011.
El Newcastle terminó el partido con 34 disparos a puerta por segunda vez esta temporada, y su guardameta, Martin Dubravka, realizó 15 paradas para mantener el marcador a favor.
La tónica recordó a sus recientes empates contra el Manchester United y el Arsenal, en los que se lamentaron de las ocasiones desperdiciadas, pero los Reds no cejaron en su empeño.
El total de xG del Liverpool se vio incrementado en cierta medida por la concesión de dos penaltis -el primero de ellos fallado por Mohamed Salah-, a cada uno de los cuales se asignó un valor fijo de 0,76.
El egipcio compensó con creces su error en la segunda parte, pero si el Liverpool no se hubiera llevado la victoria, se habría investigado más a fondo otro despilfarro de Darwin Núñez.
El uruguayo se ha labrado una reputación de incapaz de aprovechar sus oportunidades, y a continuación protagonizó un acto similar, sin marcar en ocho disparos y con un valor de 1,61 xG.
Para que nos hagamos una idea, ambas cifras fueron superiores a lo que el Newcastle produjo en el partido como equipo.
El Liverpool se limitó a destrozar a un Newcastle que había mantenido su portería a cero contra equipos como el Arsenal y el Manchester City, y en la Liga de Campeones contra el AC Milan.
Estaba claro que el Liverpool quería atacar el área contra las Urracas, con 25 de sus intentos desde dentro del área. Quince de ellos se produjeron en la segunda parte y sólo uno desde fuera del área.
Núñez desempeñó un papel clave en el primer gol del Liverpool, al asistir a Salah para que rematara a puerta vacía cuando podría haber disparado desde el ángulo, mientras que Diogo Jota hizo lo propio en el segundo para Curtis Jones.
Ese mismo balón al área pequeña sirvió para el gol de Cody Gakpo, quien, pese a no rematar limpiamente, logró transformar otra ocasión de peligro del Liverpool.
Todo parecía demasiado fácil para los jugadores del Liverpool, que se colaban en los espacios del centro del campo y luego atravesaban la defensa del Newcastle, que en realidad ha cortado y cambiado con bastante frecuencia esta temporada por culpa de las lesiones.
El Liverpool tuvo cantidad, pero también calidad. El Liverpool promedió 0,21 xG por disparo contra el Newcastle, que es la noche y el día comparado con los 0,07 por disparo que registró con el mismo volumen contra el United.
Aunque replicar semejante exhibición es el próximo reto, no deja de ser aterrador, ya que los hombres de Klopp abrieron una brecha de tres puntos en lo alto de la tabla y que enviará una gran advertencia a los que están en la lucha por el título.