Montse Tomé (41) fue presentada en la tarde del lunes como la sustituta de Jorge Vilda (42) en la Roja. Estaba llamado a ser el mejor día de su carrera profesional, pero nada más lejos de la realidad. El ansiado momento se retrasó ante la falta de entendimiento de la Real Federación Española de Fútbol con las futbolistas, que tendrán que decidir si acuden o se arriesgan a una sanción en el caso de ignorar esta convocatoria. "Sé que van a estar aquí mañana", indicó la entrenadora.

Sus primeras declaraciones, con la voz algo temblorosa por la falta de costumbre a la exposición pública y por la difícil situación, fueron las siguientes: "Es un orgullo y un privilegio estar aquí. Han entrado las mejores futbolistas para afrontar esta competición nueva. Tenemos muchas ganas porque comienza una etapa nueva. He tenido la suerte de poder elegir a mi cuerpo técnico y me han dado todos los recursos. Vamos a generar una atmósfera de trabajo profesional y ambiciosa".

La asturiana hizo referencia al complejo contexto y a las peticiones de las internacionales: "He hablado con las jugadoras, pero no lo voy a desvelar. Tengo toda la confianza en ellas. Creo que estamos rodeadas de un grupo increíble. El contador está a cero a partir de hoy". Reconoció, eso sí, que la situación es "especial y excepcional". Y, en esa misma línea, agregó que la RFEF "ha trabajado" en la resolución de esta problemática con el foco puesto en la "buena comunicación".

Además de confirmar que ha dejado fuera de la lista a Jenni Hermoso para "protegerla", explicó que ha sentido "el respeto" y "la confianza" de todas las internacionales durante los últimos cinco años. Más contundente si cabe fue a la hora de expresar su compromiso para el futuro. "Vamos a poder hacer que puedan desarrollar su profesión como se merecen y tenemos muchas ganas de ser parte del cambio", apuntó Tomé, quien dejó claro que ella no es igual que Jorge Vilda porque  su personalidad es "diferente", además de, según dijo, poseer otros valores.

Sus aplausos a Rubiales

"Me siento bien; quizá mucha gente no me conoce porque he estado a la sombra, pero tengo confianza en mi trabajo y tenemos muchas ganas de empezar esta concentración y poder hacerla bien. Yo soy alguien que empatiza. Me gusta estar cerca de ellas. Lo que ha pasado es muy desagradable. También soy respetuosa con lo que hacen los demás", agregó Montse, a quien le hubiese gustado arrancar ya la concentración.

"No me sentí bien ese día. Tuvimos que venir aquí porque nos lo dijeron. No me siento parte. Las dos veces que aplaudí fue cuando Luis Rubiales dijo lo de que somos campeones y campeonas del mundo, y cuando me dijo que iba a ejercer como directora técnica. Cuando sentí tranquilidad de verdad fue cuando publiqué el comunicado. Quizá no tendría que haberlo hecho. Ese momento, la masa social... Después se vio cuál es mi postura. Siento mucho lo que ha pasado durante todo este tiempo. Ha trascendido a todos los niveles y esto no puede ser", explicó sobre aquella Asamblea General Extraordinaria.

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