Han cambiado mucho las cosas desde que Jenni Hermoso (33) cruzó el charco para concentrarse con España, entonces dirigida por Jorge Vilda (42) y ahora comandada por Montse Tomé (41), hasta su reciente regreso. Miles y miles de personas han salido a las calles en diferentes puntos del mundo para defenderla por el beso no consentido de Luis Rubiales (46) y por las acusaciones de este último, apartado de la RFEF por la suspensión provisional de la FIFA.
La atacante ya se ejercita con la camiseta del Pachuca después de haber tenido más de dos semanas de asueto. No ha podido estar todo lo tranquila que le hubiese gustado -tampoco cuando estuvo en Ibiza con algunas de sus compañeras de selección-, se ha visto obligada a estar en contacto casi permanente con el sindicato FUTPRO y tuvo que publicar un comunicado el pasado 25 de agosto como reacción a las declaraciones de Rubiales en aquella Asamblea General Extraordinaria.
La ex del Barcelona y el Atlético de Madrid, que finalmente dio el paso de denunciar ante la Fiscalía General del Estado, recibirá el cariño de su afición este domingo, en los minutos previos del encuentro ante los Pumas de la UNAM (a partir de las 15h45 locales y las 23h45 CET). Ambos conjuntos, separados por sólo un punto y con el objetivo compartido de acabar en posiciones de playoffs, se verán las caras con motivo de la décima jornada del torneo Apertura.
Hermoso, con tres tantos y dos asistencias durante el campeonato celebrado en Australia y Nueva Zelanda, es una jugadora clave para las Tuzas (sus 23 dianas en 32 participaciones así lo demuestran). Ahora, más de tres meses después de su última intervención, regresa para intentar mejorar los resultados de un plantel que acumula dos victorias consecutivas tras haber sufrido una racha de tres jornadas sin ganar (sólo un triunfo desde la segunda hasta la octava).