Virginia Torrecilla (28) se despidió de la afición del Atlético de Madrid en el partido contra el Granadilla Tenerife, que se saldó con victoria holgada de las anfitrionas por 4-0 (Latorre, Cardona, Navarro y Thais en propia puerta). Con esa alegría última y sin posibilidad de subir o bajar en la clasificación (cuarto puesto), ponen fin a su trayectoria en el torneo regular con el amargo sabor de haberse quedado fuera de la Champions. Eso sí, el martes disputarán la semifinal de la Copa de la Reina frente al Alhama de Murcia.
Se marcha después de cuatro temporadas en la capital, adonde llegó gracias a su buen hacer en el Mundial de Francia, país en el cual competía (Montpellier). Antes de aquella experiencia, cuando ya era internacional con España, formó parte de la plantilla del Barcelona. Aunque su logro vital y más importante fue superar esa enfermedad, tiene la oportunidad de levantar un título que, como deportista de élite que es, le hará seguro mucha ilusión y que, además, sería un broche fantástico a esta etapa.
Su recorrido como internacional empezó allá por el año 2015 y su última experiencia a las órdenes de Jorge Vilda fue justo antes de que se declarara el estado de alarma por la pandemia de la COVID-19, es decir, en marzo de 2020. Es prácticamente improbable que vaya a poder estar en el próximo campeonato de Australia y Nueva Zelanda, pero aún por debajo de la treintena tiene tiempo para recuperar su mejor versión y así ganarse la oportunidad de volver a representar a su país.
Virginia se va "feliz"
Dos meses después de jugar su último encuentro con la Roja, fue operada por el servicio de neurocirugía de la Clínica Universidad de Navarra de Pamplona. Tuvo que esperar hasta enero del pasado año para volver a competir de nuevo, precisamente frente al Barça, pero su papel ha sido residual desde entonces y no ha sido titular en ninguna ocasión. Este viernes estuvo sobre el césped durante 25 minutos, la cantidad más elevada desde que tuvo que colgar las botas de forma provisional.
Torrecilla, que está "feliz por haber compartido tantos momento bonitos" en el Atleti y cuyo futuro está ahora en el aire, vivió otro momento inolvidable y muy bonito cuando levantó al cielo de Almería la Supercopa de España, el título conquistado el 16 de enero de 2021 (0-3 ante el Levante en la final). La '14' se encontraba inmersa entonces en su complejo y largo periodo de recuperación e iba a tener que esperar poco más de 365 días para versite de corto otra vez.