Ante el enjambre de periodistas presentes durante los 15 minutos asignados a la prensa, recorrió el césped Tito Vilanova de la Ciudad Deportiva Joan Gamper antes de caer en los brazos de Xavi Hernández y el resto de miembros de la plantilla. El lunes por la mañana, Joan Laporta quería demostrar que el partido de vuelta de los cuartos de final de la Liga de Campeones contra el PSG marcaría el regreso de su club a la máxima categoría. Pero la expulsión de Ronald Araújo lo cambió todo.
El Barça se encamina ahora hacia una temporada sin títulos, con no sólo problemas financieros que afrontar, sino también la sucesión del entrenador, que jugó inteligentemente al anunciar muy pronto su marcha a final de temporada, atrapando a la directiva, que hasta entonces le había defendido con suavidad, y que ahora se da cuenta de que fichar a un nuevo técnico al precio (apenas cuatro millones de euros por temporada) que conlleva es más difícil de lo que parece. Sólo parece haber un entrenador que reúna los requisitos económicos: Rafa Márquez, entrenador del filial, en 1ª RFEF. Candidatos ha habido y habrá muchos, desde Hansi Flick y Luis Enrique hasta Roberto de Zerbi y Julian Nagelsmann.
En declaraciones a Esport3 ese lunes, Laporta confirmó que su primera opción seguía siendo Xavi: "Es un tema que trataremos a final de temporada. Entiendo las circunstancias que le han llevado a anunciar esta decisión (la noche de la derrota por 3-5 ante el Villarreal, el 27 de enero). Es una situación que se puede cambiar", explicó al día siguiente del partido contra los groguets: "Me dijo que se marchaba y que quería terminar la temporada. Es un acuerdo que acepto porque Xavi es quien lo propone y es una leyenda del barcelonismo". La actitud de Laporta no deja de ser divertida, ya que en el último debate con las urnas se burló de su rival Víctor Font por haber puesto a Xavi en el centro de su proyecto... antes de darse cuenta de lo evidente: se necesitaba una figura poderosa para suceder a Ronald Koeman, y que no fuera codiciosa (dos millones de euros por temporada inicialmente).
Las últimas noticias apuntan a que las relaciones entre Xavi y Deco, el director deportivo, han mejorado. ¿Podría ser éste un indicio más de que el triunvirato va a continuar?
Un mercato salpicado
Económicamente, el Barça ha ido por buen camino en sus previsiones de ganancias en la Liga de Campeones, ya que presupuestó alcanzar los cuartos de final. Cualquier cosa más habría sido una ventaja.
Sin embargo, los problemas no se han resuelto del todo. Todavía hay que encontrar un comprador para el 24,5% de Barça Studios. La venta de al menos un jugador de los importantes daría al club un respiro en el mercado de fichajes. Frenkie de Jong es la opción obvia, entre otras cosas porque su salario es uno de los últimos en ser acordados por la directiva de Bartomeu. Araújo, muy cortejado últimamente por el Bayern , perdió algo de credibilidad ante la afición blaugrana tras su metedura de pata del martes, pero su condición de jugador de La Masía (que es una verdad a medias) le convierte en una de las figuras clave de la imagen mediática vendida por Laporta. Y la ventaja, aunque limitada, de haber fichado a jugadores libres a menor coste es que tiene garantizada la rentabilidad. Así las cosas, Iñigo Martínez y Marcos Alonso están abocados a marcharse. Si Xavi no da marcha atrás en su decisión de marcharse a final de temporada, Jules Koundé también podría salir.
Para reforzar las filas este verano, dos nombres suenan en la prensa catalana: Joshua Kimmich y Bernardo Silva. Mientras que el portugués parece muy interesado en llegar este verano, según Joao Félix, el fichaje del alemán parece difícil de concretar. Por un lado, costaría entre 50 y 60 millones de euros. Por otro, si Xavi se queda, la prioridad debería ser traer a un auténtico 6 para respaldar a Gavi, aunque Andreas Christensen conserve su estatus de nuevo mediocentro defensivo. Para Martín Zubimendi, la prioridad del técnico, esto parece tan complejo como para Kimmisch. Queda Nico González, que fue vendido por 8,5 millones de euros (y un 40% en la reventa) al Oporto la temporada pasada, y que tiene una cláusula de recompra prioritaria de 30 millones de euros. El club también podría buscar un delantero centro de renombre, ya que Lewandowski está a punto de cumplir 36 años. El "Tigrinho" Vitor Roque todavía se está fogueando, y sin duda necesitará un jugador más experimentado que le acompañe. Laporta lleva años soñando con Erling Haaland pero, aparte del precio y el sueldo, sigue habiendo serias dudas sobre la capacidad técnica del Cyborg en un equipo experto en jugar desde la posición.
Un salvavidas llamado Espai Barça
El regreso de Laporta al Barça se debió más a su nombre que a su programa, y ha visto cómo se marchaban algunos de sus colaboradores más cercanos. Ferran Reverter se marchó en 2022, Mateu Alemany dejó de ser director de fútbol en 2023, y Eduard Romeu y Maribel Meléndez le siguieron en 2024. Todos fueron decisivos en el rápido rescate del club, con las famosas 'palancas' activadas para reponer las arcas.
En teoría, lo más difícil ya ha pasado, ya que está previsto que el nuevo Camp Nou se entregue el próximo mes de noviembre con motivo del 125 aniversario del club, y su capacidad aumentará hasta los 100.000 espectadores en 2025. El Espai Barça, en el corazón del barrio de Corts, se convertirá en un nuevo templo del consumo en la Ciudad Condal. El club no ha perdido ni un ápice de brillo, gracias sobre todo a los tres trofeos que ha levantado (Copa del Rey 2021, Liga y SuperCopa 2023), y sigue siendo muy atractivo para los turistas. Sin duda, el nuevo estadio volverá a convertirse en uno de los lugares más visitados de Barcelona.
De vuelta al timón del club gracias a su glorioso pasado durante los años de Frank Rijkaard-Pep Guardiola y a su experiencia tras el delicadísimo mandato de Joan Gaspart, Laporta dispone aún de dos temporadas antes de las próximas elecciones para consolidar el rescate del Barça. Está por ver hasta dónde se atreverá a llegar, aunque sea siguiendo los pasos de Florentino Pérez en el controvertido proyecto de la Superliga europea.