En Wembley, Italia se jugaba tres puntos fundamentales para el segundo puesto del grupo, pero no hubo nada que hacer ante una Inglaterra que se apoyó en un letal Harry Kane para voltear el partido y ganar 3-1, consiguiendo así su billete definitivo para Alemania.
En la primera parte, la Azzurra, que cambió completamente de cara con once cambios respecto al desafío de San Nicola, empezó con fuerza, demostrando que era capaz de plantar cara a la selección inglesa en Londres.
Los azzurri mantuvieron el control del partido de forma ordenada. Fruto de ello, en el minuto 15 llegó la primera ocasión real, que se tradujo inmediatamente en el gol de la ventaja. Aprovechando un centro desde la derecha de Di Lorenzo, inspirado en una acción iniciada por El Shaarawy, Gianluca Scamacca golpeó el balón con un potente y venenoso disparo, batiendo a Pickford y marcando el 0-1, firmando así su primer gol en la selección.
Ante una Inglaterra desordenada, los Azzurri estuvieron a punto de doblar su ventaja menos de diez minutos después, apoyándose de nuevo en el delantero de la Atalanta, quien, sin embargo, disparó muy cerca del poste defendido por el guardameta del Everton.
El poder de los anfitriones crecía con el paso de los minutos, a pesar de algunos momentos de gran dificultad que vivieron en torno a la media hora de juego, fruto de la buena presión de los italianos. Pero se veía venir lo que luego pasó. Tras una falta de Di Lorenzo sobre Bellingham dentro del área, encontró el empate desde los once metros con un gol de Kane, que celebró así su gol número 60 con los Tres Leones.
Una historia distinta
Con el empate, los ingleses se crecieron aún más apoyándose en el talento de las individualidades que maneja Southgate. Crecieron en intensidad pero también en confianza, empujado por el público de Wembley.
Aplastados por el pressing y las acometidas de los ingleses, los de Spalletti se fueron viniendo abajo cada vez más, hasta encajar el 2-1 en el minuto 57, que firmó la remontada definitiva de los ingleses gracias a Marcus Rashford, quien superó a una defensa confusa y arrojó un 'pedrusco' sobre las esperanzas de Italia.
Después, fue Harry Kane el encargado de cerrar el marcador, firmando su doblete personal con un gol de campeón absoluto, que llegó al final de una gran acción personal en la que el delantero del Bayern arrolló a la defensa azzurra y batió a Donnarumma con un disparo cínico y letal.
En la parte final, el desafío también se recrudeció en el área inglesa, con varias incursiones de los azzurri que intentaron al menos hacer menos pesada la derrota. La mejor ocasión la tuvo el suplente Riccardo Orsolini, pero no acertó a marcar en la última acción del partido.
La selección italiana cae así al tercer puesto de la clasificación, superada por Ucrania, que venció a Malta, con cada vez menos partidos para recuperar la posición perdida. Será, pues, decisivo el choque del próximo 20 de noviembre.
Jugador Flashscore del partido: Harry Kane (Inglaterra).
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