Por eso Flashscore, en colaboración con un equipo de analistas de la empresa checa de datos 11Hacks, te ofrece cada viernes un resumen basado en datos sobre dónde podrían producirse esos resultados (in)esperados en el mundo del fútbol para ayudarte a hackear en última instancia el fin de semana.
Wolfsburgo - Augsburgo, sábado - 15:30 CET
El Wolfsburgo atraviesa una larga crisis. Su última victoria en liga se produjo a mediados de diciembre contra el Darmstadt, actualmente último clasificado, lo que significa que llevan 10 jornadas esperando para volver a sumar tres puntos. Tras cuatro partidos complicados contra el Dortmund, el Eintracht, el Stuttgart y, más recientemente, el Bayer Leverkusen, por fin vuelven a ser favoritos, pero aún tienen un enorme reto por delante.
El estilo de juego del Augsburgo, muy bien dirigido, les causará problemas. El técnico danés Jess Thorup ordena a su equipo jugar en bloque alto con una rápida transición al ataque mediante el menor número de pases posible, y los datos demuestran que el Wolfsburgo no sabe aprovechar los espacios libres que deja a sus espaldas la defensa. Crea muy pocas ocasiones de contraataque, y sólo ha marcado seis goles en lo que va de temporada, la cuarta cifra más baja de la Bundesliga.
Mientras que el Wolfsburgo es, sin duda ,un equipo lleno de excelentes rematadores de cabeza que pueden amenazar la portería contraria, la defensa del Augsburgo tiene potencial para anular esta fortaleza. De hecho, son los cuartos mejores de la liga en el aspecto aéreo.
En el último tercio, la eficacia del equipo es mucho menor, pero ahí es cuando entra en juego la fortaleza especial del equipo: recoger balones sueltos. Más malas noticias para el Wolfsburgo, porque sólo los jugadores del Borussia Mönchengladbach son peores en estas batallas defensivas. Además, los visitantes no podrán contar con el defensa Moritz Jenz ni con el centrocampista defensivo Yannick Gerhardt por sanción, lo que supone un golpe considerable.
Ya en su primer enfrentamiento, a finales de octubre, el Augsburgo controló visiblemente el juego y creó ocasiones significativamente mejores, aunque una ajustada victoria por 3-2 no lo sugiera sobre el papel. El técnico del Wolfsburgo, Niko Kovac, tiene ahora un cuchillo en la garganta y deberá idear algo nuevo para triunfar este fin de semana.
Sevilla - Celta de Vigo, domingo - 14:00 CET
El domingo se enfrentan en LaLiga los dos equipos que ya han cambiado de entrenador esta temporada. Mientras que Quique Sánchez Flores tomó las riendas del Sevilla a mediados de diciembre, el nuevo técnico del Celta de Vigo apenas lleva unos días en el cargo. El sucesor del experimentado Rafael Benítez es Claudio Giráldez, que ha prosperado con el filial del Celta.
El Sevilla de Quique se aferra a la 14ª plaza y sigue ofreciendo actuaciones muy irregulares. Hace tres semanas, perdió ante el Real Madrid por la mínima y luego logró vencer a la Real Sociedad, sexta, en un partido igualado, pero estropeó esa buena impresión con un empate en el campo del Almería, último. El nuevo técnico aún no ha resuelto los problemas en el departamento defensivo, que bajo su dirección está permitiendo 1,43 goles esperados por partido, el quinto más alto en el periodo analizado.
Antes de la llegada de Quique, el Sevilla tenía grandes problemas, sobre todo en defensa, por lo que era muy vulnerable a los contraataques. Aunque esto se ha mejorado desde entonces, el contragolpe del Celta seguirá siendo una prueba difícil. Giráldez domina a la perfección las transiciones ofensivas y, como no tiene tiempo para poner en práctica sus ideas, probablemente no se desviará demasiado de su estilo de juego establecido.
Lo que sin duda facilitará su debut serán las bien organizadas jugadas a balón parado del Celta. En cuanto a datos, sólo el líder, el Real Madrid, y el segundo, el Girona, crean mejores ocasiones en esa faceta, y eso es una gran arma. Mientras tanto, el Sevilla es el tercer equipo que más goles ha marcado a balón parado, por detrás del Mallorca y el Villarreal.
Utrecht - Nimega, domingo - 14:30 CET
Aunque el Utrecht es actualmente octavo en la Eredivisie -en puestos de play-off de la Conferene-, la zona media de la tabla está muy equilibrada y cada punto vale mucho. Esto será doblemente cierto en el partido de este fin de semana contra el Nimega, sexto clasificado.
El Nimega no será un rival fácil. El estado de forma de ambos equipos es muy similar. Un buen indicador es la métrica de los puntos esperados, que sigue la calidad de las ocasiones creadas y permitidas, según la cual ambos equipos deberían haber ganado puntos casi idénticos desde diciembre. Además, el Nijmegen es el quinto equipo que más goles ha marcado a domicilio esta temporada y, desde luego, no vendrá sólo a defenderse.
No sólo son capaces de crear con regularidad un gran número de ocasiones a partir de ataques sucesivos y de conseguir disparos de combinaciones a ras de suelo, sino que también pueden amenazar a partir de centros cuando es necesario. Es probable que apliquen esta estrategia contra el Utrecht, que es más bien mediocre en el juego aéreo y suele conceder ocasiones peligrosas desde esas situaciones. Además, el Nimega dominará, sin duda, la recuperación de balones sueltos, por lo que es muy posible que inmovilice al Utrecht en el tercio defensivo y marque en alguna fase del partido.