Según Sky Germany, Tuchel se reunió el miércoles con la dirección del club bávaro y ambas partes llegaron a un acuerdo para que el técnico siga al frente del equipo hasta final de temporada.
Una decisión que, a fin de cuentas, no sorprende, dados los malos resultados del Bayern de Múnich en los últimos tiempos.
En la Bundesliga, el vigente campeón es segundo, a ocho puntos del líder, el Bayer Leverkusen, y en la Liga de Campeones necesita remontar el 1-0 encajado en Roma ante la Lazio para clasificarse para cuartos de final. Los bávaros ya han sido eliminados de la Copa de Alemania, donde cayeron ante un equipo de tercera categoría.
Tras una primera mitad de temporada mediocre, el club entró en crisis tras su derrota por 3-0 ante el Leverkusen de Xabi Alonso el 10 de febrero, que enfureció a aficionados y jugadores por igual.
"Para ser sincero, estoy cabreado", declaró Thomas Müller en una entrevista posterior al partido. "Citando a Oliver Kahn: lo que echo de menos de nosotros, los jugadores, son las pelotas en los partidos".
"Estamos mostrando unos planteamientos significativamente mejores en los entrenamientos. Está bien sentir presión, pero tiene que haber energía y libertad. Eso falta en nuestro juego".
"Tenemos muchos jugadores internacionales al más alto nivel, tenemos que intensificar nuestro juego".
Después de esa derrota, el Bayern fue derrotado a domicilio por la Lazio (1-0) en el partido de ida de la Liga de Campeones, antes de sufrir una humillante derrota por 3-2 a manos del Bochum.
Tras la derrota, varios jugadores, entre ellos Müller, Joshua Kimmich y Matthijs de Ligt, perdieron la confianza en Tuchel, mientras que la gran mayoría de los aficionados deseaban su marcha.
El alemán, que asumió el cargo el pasado mes de marzo, ha sucumbido a la presión, y se espera la confirmación oficial de la decisión a lo largo del día de hoy.