Cuando sonó el teléfono móvil, Borja Iglesias no daba crédito a lo que oía. "No he pasado por el mejor momento de mi carrera, casi no me lo podía creer", dijo el futbolista del Bayer Leverkusen sobre su primera conversación con Xabi Alonso. Sin embargo, pronto entendió que no era ninguna broma. "Quiero devolver la confianza con mi trabajo", apuntó.
El internacional español, que le marcó a su actual equipo en la Europa League, asumirá el papel de suplente de Patrik Schick, que a su vez sustituye al lesionado Victor Boniface. Nada nuevo para él, ya que tampoco fue titular en Heliópolis.
Pero con trabajo y disciplina, Iglesias quiere ganarse sus oportunidades y empezar con buen pie en el líder de la Bundesliga: "Vamos a hacer mucho ruido". Además, no quiso prometer títulos, pero sí reconoció que lo intentarán.
Con su presencia física, encaja a la perfección en el equipo y en el sistema de Alonso. En él, los delanteros no sólo están pensados para marcar goles, sino que también son esenciales en la elaboración.
Durante sus primeros días en Alemania, Borja compartió fotos de entrenamientos y paseos por la ciudad en Instagram. En general, insiste en que para él es importante ser reconocido como algo más que un simple atleta.
Su contrato de cesión dura hasta el verano, pero el gallego no piensa en eso. "Voy a darlo todo", prometió.