Luces y sombras. El Baskonia es el sorpresivo equipo que enamora a los aficionados del baloncesto. El club español completa una racha de tres partidos con victorias al hilo y cerró este miércoles un triunfo de oro contra el Estrella Roja de Belgrado. Mucho brillo para un conjunto modesto y bien estructurado.
El Fernando Buesa Arena fue testigo de la aplicación de una inteligente táctica por parte del local: un despertar obligado en defensa ocasionó el acierto en triples del Baskonia. Gracias a los puntos, el plantel puso tierra de por medio y marcó distancias con el club serbio.
El conjunto dirigido por Joan Peñarroya extiende su pleno de victorias. En las dos primeras jornadas de la Euroliga, el Baskonia superó al Valencia Basket -con suspense incluido- y Partiza.
Markus Howard (23) fue, de nuevo, el líder del Baskonia. El estadounidense se llevó el equipo al hombro y, con su habitual combinación entre potencia física y efectividad, dejó 19 puntos al descanso. El escolta aprovechó la debilidad defensiva del Estrella Roja para movilizar el balón y entregarle espacios a sus compañeros.
Mientras que en el Baskonia se respira tranquilidad, el ambiente en Madrid es diferente. El Olympiakos sorprendió al equipo ibérico con un mecanismo defensivo estructurado que le mostró solido. El plantel griego, además, llevó a cabo su estrategia y, con una amplia circulación del balón, encontró buenos tiros y le complicó la andadura al rival.
El Real Madrid, en cambio, sufrió un varapalo. En un partido duro y cruel, el cuadro merengue ha cedido terreno contra el Olympiakos. Una canasta de Kostas Sloukas (32) sentenció la derrota del plantel español en el tramo final del encuentro.
El equipo heleno fue un rival complicado, tal y como lo había advertido Chus Mateo en la antesala del choque. El Madrid, de hecho, estuvo por delante en el marcador en varios tramos del duelo. Sin embargo, los errores defensivos le pasaron factura al club, que encarriló su segunda derrota en la fase regular de la Euroliga.