El portugués Nuno Tavares, que acabó siendo expulsado en el minuto 87, abrió el marcador en el minuto 47 y el Marsella ampliaría diferencias con un gol en propia de Maxime Esteve a la hora de juego.
Cuando los visitantes ya jugaban en inferioridad, el Montpellier redujo las diferencias con un penalti transformado por Téji Savanier, pero sin tiempo para amenazar el triunfo marsellés.
"Hemos sufrido un poco, pero hemos hecho un buen partido, sobre todo al inicio del partido, aunque nos faltó un poco de velocidad. En la segunda parte aumentamos nuestro nivel de juego y hemos marcado para llevarnos una victoria en un campeonato en el que nunca es fácil ganar", analizó tras el partido el croata Igor Tudor, entrenador del Marsella.
Con esta victoria, la cuarta consecutiva, el Marsella suma 36 puntos, a 4 del Lens y a 8 del París SG.
Y tan importante o más, el Marsella mantendrá como mínimo la ventaja que saca a sus perseguidores en la pelea por meterse en la próxima Liga de Campeones.
Después de quedar eliminados en Champions, el equipo dirigido por Tudor ha reaccionado en el campeonato, derrotando a dos rivales directos (Lyon y Mónaco) antes de la tregua mundialista y a Toulouse y Montpellier después de la pausa por Catar 2022.
El Marsella se muestra demás muy consistente en el exterior, con una sola derrota fuera del Velódromo, contra el París SG en el Parque de los Príncipes a mediados de octubre.
Liderados por uno de sus mundialistas, Jordan Veretout, el Marsella dominó el partido frente a un compacto Montpellier, pero cuando encontró el error en la defensa local, no perdonó y se llevó la victoria.
Rennes gana, Lille tropieza en casa
En la lucha se mantiene también el Rennes (4º con 34 puntos) después de vencer 2-1 al Niza (11º) en el partido que cerraba la 17ª jornada de la Ligue 1.
El que perdió una gran oportunidad de mantenerse en la pelea por los puestos de Champions fue el Lille (7º con 30 puntos), que no pasó del empate en casa ante el Reims (11º).
Durante el partido se vivió un extraño ambiente, ya que los ultras boicotearon el partido como protesta por la hora del encuentro (17:00 horas) y durante muchas fases el público protestó el juego de su equipo, demasiado conservador a su gusto.
Esto llevó al técnico portugués Paulo Fonseca a explotar en conferencia de prensa. "Si los aficionados no están contentos de la manera que juega el equipo, pueden ir a ver al presidente y yo me puedo ir", aseguró visiblemente molesto.
"Nuestros aficionados siempre nos han apoyado, pero hoy han hecho lo contrario cuando el equipo les necesitaban. Estoy muy decepcionado con los hinchas", insistió.
En el otro partido jugado el lunes, el Troyes (13º) se aleja de los puestos de descenso tras ganar a un rival directo, el Estrasburgo (19º).
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