El de Quique González en el minuto 21 del partido contra el Málaga, en La Rosaleda, fue el único tanto que se vio en Segunda este pasado domingo. El delantero del conjunto armero le dio los tres puntos a su equipo, que aspira a volver a LaLiga Santander tras rozar el ansiado ascenso hace tan solo unos meses. El atacante, con un papel mucho más protagonista que en el último año del cuadro vasco en la élite, decidió el choque en una acción marcada por el error de Alberto Escassi.
Los seis equipos restantes se quedaron sin poder celebrar nada más que un simple punto tras un empate a cero de esos que no suele gustar demasiado a la afición -salvados en aquellos casos ante rivales superiores-. En este último grupo no podemos introducir a ninguno de ellos porque eran encuentros entre conjuntos muy igualados, aunque de seleccionar uno sería el Cartagena, que se medía al Granada, uno de los descendidos de la campaña 2021/22.
El resultado del duelo entre Lugo y Mirandés le sirve al cuadro visitante para -provisionalmente- dejar atrás el farolillo rojo, pero los nueve puntos cosechados -los mismos que el Málaga- resultan muy insuficientes. Además, de acabar ahora la competición, el cuadro andaluz estaría por delante porque manda lo ocurrido en el partido entre ambos (1-3). No se aplica hasta que finaliza la jornada 42. Como tienen el mismo golaveraje general (-9) pero los del norte cuentan con más goles a favor (11), los de Pepe Mel aparecen últimos.
Tampoco pudieron festejar Albacete y Villarreal B ningún tanto en el Carlos Belmonte. Los locales son séptimos y tienen 21 puntos, los mismos que los ya mencionados Cartagena y Granada. El filial amarillo, que está superando las expectativas en su regreso a Segunda, se mantiene en la zona media (12º clasificado con cuatro menos que los tres anteriores).