El piloto de Mercedes dijo a los periodistas antes del Gran Premio de EE.UU. que no se debe permitir que las carreras se vuelvan "demasiado blandas".

Hamilton se quedó fuera de la carrera en Lusail después de una colisión en la primera curva con su compañero de equipo, George Russell, que terminó la carrera y dijo que había estado más allá del límite de lo aceptable.

"No llegué a sentir el dolor que sintieron los pilotos, pero obviamente he estado aquí mucho tiempo y Malasia fue mucho más calurosa de lo que fue esa carrera y sé lo que es perder cuatro o más kilos en una carrera y apenas poder mantenerte en pie", dijo el británico.

"Pero mi sensación al respecto es que éste es un deporte extremo. No hay corredores de maratón que se desmayan después del maratón diciendo que hay que hacerlo más corto. Este es un deporte extremo y nos pagan muy bien por lo que hacemos".

Hamilton dijo que su perspectiva era que cuando no se sentía bien después de terminar una carrera, lo veía como un mensaje para entrenar más duro.

"Personalmente no quiero que acorten las carreras y nos lo pongan más fácil", añadió.

"Quiero que sea extremo, quiero sentir la diferencia, quiero sentir dolor en mi cuerpo... tenemos que tener cuidado de cómo nos movemos con los cambios... es como 'no nos ablandemos demasiado'".

"Se supone que somos atletas de élite. Para ser de élite hay que ir al límite".

Algunos de los que corrieron bajo el calor del 8 de octubre acabaron al borde del colapso, vomitando y gravemente deshidratados tras la bandera a cuadros, mientras que el debutante de Williams Logan Sargeant se sintió demasiado enfermo para continuar y se detuvo.

La FIA dijo después que estaba estudiando la situación "para ofrecer recomendaciones para futuras situaciones de condiciones meteorológicas extremas".

El piloto de Aston Martin Lance Stroll, que dijo que estuvo a punto de desmayarse durante la carrera, declaró a la prensa el jueves que había tardado "un buen par de días" en volver a sentirse al cien por cien.